SANTIAGO DE COMPOSTELA, 18 (EUROPA PRESS)
UPTA-Agtamar cifra en más de 5.000 los mariscadores, percebeiros y rederas que se verán beneficiados con el adelanto de la jubilación, después de que el Consejo de Ministros aprobase el pasado martes el proyecto de ley de Pesca Sostenible e Investigación Pesquera.
Y es que la nueva norma pesquera introduce coeficientes reductores para la edad de jubilación de algunos colectivos de trabajadores del ámbito del mar y pesquero, cuyas profesiones son “especialmente penosas” y suponen un “gran desgaste”.
Sobre esta cuestión, la Asociación Gallega de Trabajadores Autónomos y del Mar (Agtamar), que se integra en UPTA, valora que la nueva ley pondrá “punto final” a la discriminación que sufría el colectivo. “Sin duda, la noticia es la más esperada por las personas trabajadoras autónomas del mar, en su mayoría mariscadoras, rederas y percebeiras”, remarca.
Estas asociaiones indican que se beneficiará unas 3.200 trabajadoras por cuenta propia y unos 2.000 hombres. Estos cambios incluyen el reconocimiento del coeficiente al colectivo de rederas, con un 0,15, y el incremento de este indicador para el de marisqueo a pie, integrado mayoritariamente por mujeres que pasa al 0,15 y no con el 0,10 actual.
Por parte de UPTA se considera que “se debe poner en marcha la revisión inmediata del catálogo de enfermedades profesionales del colectivo y la puesta en marcha de un nuevo catálogo de enfermedades profesionales para aquellos sectores altamente feminizados”.
La presidenta de Ammupesca, Rita Míguez, subraya que: “La especial dureza de nuestra actividad hace mella en la salud del colectivo y tenemos que proteger ante todo el bienestar físico de miles de mujeres que desarrollamos uno de los trabajos más duros del mercado de trabajo por cuenta propia”.
“Este cambio legislativo se produce gracias al trabajo que han desarrollado a lo largo de estos años las mujeres trabajadoras del mar, es una satisfacción para todos y no desistiremos hasta conseguir dignificar su trabajo con los catálogos de enfermedades profesionales, accidentes de trabajo y el resto de los asuntos aún sin resolver”, apunta por su parte el presidente de UPTA, Eduardo Abad.