MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La alianza #CEOPorLaDiversidad ha celebrado este 7 de julio el primer encuentro presencial de su segundo año de andadura en una jornada celebrada en el Centro Financiero Génova de Madrid a la que han asistido 30 de los 75 CEO de las empresas adheridas a la alianza, desarrollada por la Fundación Adecco y la Fundación CEOE, en torno a una visión común de diversidad, equidad e inclusión.
Su objetivo es impulsar el desarrollo de estrategias que contribuyan a la excelencia empresarial, a la competitividad del talento en España y a la reducción de la desigualdad y la exclusión social, como señalan sus impulsores.
Así, recientemente y, fruto del trabajo de esta alianza, se creó la Guía para acelerar la implantación de estrategias de diversidad en la empresa, hilo conductor para establecer un modelo de referencia y analizar los conceptos y elementos más estratégicos para la alta dirección de las empresas. Por ello, su rol como agentes impulsores de estas políticas y la figura del liderazgo inclusivo han sido los temas que han marcado la agenda de la jornada.
La sesión ha estado presidida por la presidenta de la Fundación CEOE, Fátima Báñez, y el presidente de la Fundación Adecco, Enrique Sánchez, quienes han lanzado un mensaje de “compromiso con los principales retos sociales a los que nos enfrentamos en España y con la Agenda 2030 y, al mismo tiempo, de oportunidad para que estas políticas contribuyan a que nuestras empresas y nuestro país sea más competitivo”.
Asimismo, han comentado que se vive un momento de “gran transformación social, digital y demográfica acelerada por el coronavirus y las empresas, y quienes las lideramos, debemos inspirar a nuestros equipos, a nuestros clientes, y en general a la sociedad, para generar un cambio real”.
Si antes de la pandemia la Fundación Foessa cifraba en 6 millones a las personas en riesgo de exclusión social en España, la crisis económica de la Covid-19 podría sumar 8,5 millones de personas más, alcanzando al 31% de la población.
En este contexto, los directivos han coincidido en la necesidad de comprometerse para “no dejar a nadie atrás” e iniciar una nueva normalidad que sea inclusiva desde el principio. Además, han coincidido en que la COVID-19 está reordenando la agenda empresarial y las políticas de diversidad que han de ser una prioridad compartida por todas las organizaciones.
“Son un instrumento esencial para combatir la exclusión y la pobreza en España y, al mismo tiempo, motor de competitividad. Al valor que aporta la suma de diferentes talentos, hay que añadir los riesgos reputacionales y económicos de una mala gestión de la diversidad. En efecto, la información no financiera ya ocupa un lugar prioritario en los criterios de inversión, que tienen cada vez más en cuenta elementos como la transparencia, el compromiso social, la diversidad o la inclusión de las personas que lo tienen más difícil” ha declarado el presidente de la Fundación Adecco.
En palabras de la presidenta de la Fundación CEOE, Fátima Báñez, “la diversidad es el factor diferencial de lo que va a ser la gestión de las personas hoy, pero sobre todo mañana, en un mundo con grandes transformaciones que en los últimos tiempos, debido a la pandemia, se han acelerado de forma muy relevante”, al tiempo que ha añadido que “la recuperación desde las empresas y para la sociedad que queremos tiene a las personas en el centro y en su gran diversidad, porque los equipos multiculturales, con experiencia y con juventud, y entre hombres y mujeres, somos capaces de hacer las cosas mejor”.
Mesonero ha señalado por su parte que “esta nueva era no se entiende sin la implicación personal de la figura del CEO, que ha de ser el punto de partida y la correa transmisora para que las estrategias de diversidad tengan un calado real en la organización y puedan alinearse con la Agenda 2030. Para ello, es fundamental potenciar el liderazgo inclusivo como elemento directamente proporcional al éxito de una compañía”.
Además, las directivas y directivos presentes han resaltado la importancia de potenciar los valores, actitudes y habilidades que debe tener un líder inclusivo: compromiso, humildad, empatía, amplitud de miras y defensa de la igualdad, equidad e inclusión, entre otros.