Asegura que un SMI al 60% del salario medio se alcanzó al elevarlo a 1.080 euros, y que ahora “hay que estudiar como mantenerlo”
MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El secretario de Estado de Economía, Joaquín Pérez Reyes, ha asegurado que el Ministerio de Trabajo está dispuesto a “escuchar” tanto la propuesta de patronal como de sindicatos para la subida del salario mínimo interprofesional (SMI), pero ha asegurado que mantienen su posición de que este no sea inferior al 60% del salario medio y que hay “margen para ajustarlo”.
“Vamos a escuchar tanto a patronal como a sindicatos, pero mantenemos la postura adoptada por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, de que este no sea inferior al 60% del salario medio”, ha asegurado Pérez Reyes.
De esta manera se ha pronunciado a su entrada a mesa de diálogo social para abordar la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) que ha convocado este jueves el Ministerio de Trabajo y Economía Social y que contará con la presencia de la secretaria de Acción Sindical y Empleo de CCOO, Mari Cruz Vicente; el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján, y, previsiblemente, la directora de Empleo, Diversidad y Protección Social de CEOE, Rosa Santos, entre otros.
Pese a la negativa del secretario de Estado de dar una cifra, fuentes del Ministerio de Trabajo y Economía Social habían manifestado horas antes de su intención de que la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de 2024 ronde el 4%, que sería el porcentaje de incremento que pactaron sindicatos y empresarios en el acuerdo de negociación colectiva 2023-2025, según fuentes del Departamento que dirige Yolanda Díaz.
Una subida del 4% llevaría el SMI desde los 1.080 euros mensuales por catorce pagas hasta los 1.123,2 euros al mes. En todo caso, para Trabajo, el suelo de la subida del salario mínimo para 2024 es la inflación.
Teniendo en cuenta que la media de inflación del periodo diciembre 2022-noviembre de 2023 fue del 3,8%, el 4% cumpliría el objetivo de no perder poder de renta que tiene el ministerio que dirige Yolanda Díaz.
Teniendo en cuenta que la media de inflación del periodo diciembre 2022-noviembre de 2023 fue del 3,8%, el 4% cumpliría el objetivo de no perder poder de renta.
“El Gobierno viene dispuesto a escuchar a los interlocutores sociales (…) no vamos a permitir que el SMI pierda poder adquisitivo, pero ahí hay margen para ajustarlo tras lo que nos digan”.
Al ser preguntado por medios, el secretario de Estado ha puesto en valor el trabajo de la comisión de expertos que evalúo la pasada subida del SMI, asegurando que la “clave” del éxito han sido los informes elaborados por este grupo de trabajo.
“Tenían dos tareas: decirnos cual es el SMI al 60% del salario medio y que senda seguir para que obtener esa cantidad. Culminó con éxito y España cumple hace muchos meses esa senda del 60% del salario medio, habiendo alcanzado los 1.080 en 14 pagas”, ha asegurado Pérez Reyes.
Así, Pérez Reyes ha afirmado que el objetivo es “mantener” ese 60% del salario medio, que se calculó en la última subida en función al salario medio neto de la encuesta de la estructura salarial, incluyendo nuevas métricas para que el poder adquisitivo de las familias no merme teniendo en cuenta el aumento de la inflación.
PROPUESTA DE SINDICATOS Y PATRONAL
Las organizaciones empresariales, que ya han hecho pública la propuesta que llevarán a la mesa de negociación, no se oponen a elevar la cuantía del SMI, pero han pedido que su subida se limite al 3% tanto en 2024 como en 2025, un planteamiento que, de entrada, no convence ni a Díaz ni a los sindicatos.
También UGT y CCOO consideran “insuficiente” la oferta de CEOE para la subida del SMI y abogan por tener en cuenta, no sólo el IPC general, sino también la evolución de los precios de los productos básicos, como la alimentación, para determinar su incremento.
Los sindicatos, que por el momento no han ofrecido un porcentaje concreto para la subida del SMI, se han mostrado partidarios en numerosas ocasiones de llevar el SMI hasta los 1.200 euros al mes, lo que implicaría un incremento sobre la cuantía actual del 11,1%.
El objetivo, tanto del Gobierno como de los sindicatos, es situar el SMI en el 60% del salario medio, tal y como recomienda la Carta Social Europea. En este sentido, el Instituto Nacional de Estadística (INE) informó el pasado viernes de que el salario medio español de 2022 fue de 2.128 euros al mes en términos brutos. El 60% de esa cantidad equivaldría a unos 1.277 euros mensuales.
No obstante, este jueves, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha subrayado que el salario mínimo interprofesional (SMI) tiene que subir en 2024 por encima del IPC y hacerlo en línea con el ritmo al que aumentaron los salarios medios en el segundo trimestre (+5,2%).
“Si los salarios medios en el segundo trimestre del año están subiendo al 5,2%, yo creo que por ahí debería ir la subida del salario mínimo para 2024. Esa va a ser una de nuestras propuestas encima de la mesa y veremos si hay voluntad de negociar por parte de CEOE o cómo se sitúa el Gobierno, que hasta ahora se ha referido básicamente al IPC”, ha explicado Sordo.
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, el dirigente sindical ha afirmado que “hay que ir más allá del IPC” y permitir que el SMI gane poder adquisitivo, “que falta hace, teniendo en cuenta, que productos tan básicos como los alimentos de primera necesidad, están creciendo bastante más todavía”.
Al respecto, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha apuntado que “está muy bien pedir” en referencia a la petición realizada por parte del secretario general de CCOO, Unai Sordo, de subir el salario mínimo interprofesional (SMI) entorno al 5% para 2024, pero ha pedido tener en cuenta el impacto que tiene el aumento de los salarios en las empresas.
“Está muy bien pedir, pero yo creo que esto también afecta y aquí hablo en nombre de miles de pymes y autónomos”, ha señalado Garamendi durante la entrega de los Premio Nacional Joven Empresario de la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (Ceaje) en el Auditorio del Banco Santander.
SUBIR EL SMI, UNA DE LAS PRIMERAS MEDIDAS DE DÍAZ
La subida del SMI es una de las primeras medidas que se ha fijado la vicepresidenta Díaz de cara a la nueva legislatura con un objetivo en mente: que esta renta mínima, que afecta a algo más de dos millones de trabajadores que no están amparados por la negociación colectiva, no pierda poder adquisitivo en un contexto de altas tasas de inflación.
El último dato del IPC, el adelantado del mes de noviembre, sitúa la inflación interanual en el 3,2% y la tasa media de los últimos doce meses en el 3,8%, que es la que marca la subida que experimentarán las pensiones contributivas en 2024.
La vicepresidenta Díaz se ha mostrado confiada en las posibilidades de acuerdo entre patronal y sindicatos sobre la subida del SMI. “Les pido aquí a los agentes sociales que, por el bien de nuestro país, por la necesidad que hay de serenidad y tranquilidad (…), estemos a la altura de las circunstancias y concitemos un acuerdo”, apuntó Díaz el pasado lunes.