Los ingenieros coinciden en la necesidad de extender los Perte al autoconsumo y las comunidades energéticas, las pymes industriales y la innovación tecnológica
MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
Solo un 12% de las pymes españolas declara haber recibido las ayudas que le correspondían de los fondos ‘Next Generation’, según publica el Consejo General de la Ingeniería Técnica Industrial de España (Cogiti) en su VI Barómetro Industrial, resultado de una encuesta a 3.500 ingenieros industriales.
Los resultados de este informe se han presentado en un acto conjunto con el estudio ‘Una perspectiva económica de la situación de la industria en España: actualización 2022’, elaborado por el Consejo General de Economistas de España (CGE).
En este informe se pone de manifiesto que la industria continúa perdiendo peso en la economía española, aportando menos del 17% del valor añadido bruto (VAB) total del año 2021. Su aportación al PIB nacional se sitúa en torno al 15%, cinco puntos porcentuales de la cifra que se marcó como objetivo para 2020.
PREOCUPACIÓN POR EL PRECIO DE LA ENERGÍA
El 47% de los ingenieros encuestados en el Barómetro Industrial de Cogiti considera que los elevados precios de la energía afectan “en gran medida” a la competitividad del sector. La inflación y la incertidumbre económica son las otras principales preocupaciones que manifestaron.
Además, los ingenieros coinciden en que la “rígida política medioambiental” que se autoimpone Europa es “contradictoria”, pues luego se permiten importaciones de otros países que no cumplen con los protocolos laborales y de seguridad que se les exigen a las industrias comunitarias.
Así, el 92% de los encuestados cree necesario equiparar las exigencias entre las compañías europeas y las extranjeras, ya sea con normativas medioambientales en origen (el 34% de los encuestados lo consideran así) o con medidas más estrictas para la homologación de productos (28%).
Sobre la política del Banco Central Europeo (BCE) de subida de los tipos de interés para contener la inflación, el 62% de los ingenieros que han formado parte de este barómetro creen que la medida puede afectar negativamente al sector industrial, especialmente por suponer un freno a las inversiones o por provocar el cierre de pymes industriales.
NECESIDAD DE EXTENDER LOS PERTE
En lo relativo a la actuación del Gobierno español, los encuestados consideran que el Perte de energías renovables ha sido el que más repercusiones positivas ha desencadenado, seguido del Perte del hidrógeno renovable y almacenamiento y el de microelectrónica y semiconductores.
Además, coinciden en la necesidad de extender esta medida a los subsectores de autoconsumo y comunidades energéticas (así lo opina el 25%), las pymes industriales y la innovación tecnológica.
Más de la mitad de los encuestados piensa que la reforma laboral no ha provocado cambios significativos en el sector industrial, y un 35% considera que las repercusiones negativas de esta medida superan a las positivas. Además, el 77% de los ingenieros cree necesaria una política fiscal específica para el sector industrial.
Así, el presidente de Cogiti, José Antonio Galdón, ha afirmado que el Barómetro pone de manifiesto “claras reivindicaciones que se realizan para solucionar los problemas del tejido industrial, y cierto descontento con las medidas de las diferentes administraciones”.
PERSPECTIVAS MÁS OPTIMISTAS QUE EL AÑO PASADO
Galdón considera que las perspectivas de los ingenieros son “más positivas que en los años anteriores”, cuando la crisis sanitaria afectaba de forma considerable a la situación de la industria española.
Casi el 17% de los profesionales encuestados creen que el estado actual del sector es “bueno o muy bueno”, seis puntos porcentuales por encima que en el barómetro anterior. Aún así, el 31% opina que la situación es “mala o muy mala”.
Las perspectivas a futuro no son mucho mejores, pues el 47% de los ingenieros considera que la evolución en los próximos seis meses será “mala o muy mala”, y tan solo un 15% prevé que mejore.
“Las cifras que arrojan los datos del barómetro y el informe económico coyuntural en relación a nuestro sector industrial nos indican, año tras año, que es un sector que no termina de consolidarse, pese a ser muy necesario para el crecimiento y fortalecimiento de nuestra economía”, ha reconocido el director del Servicio de Estudios CGE, Salvador Marín.
Los empleados por cuenta ajena son los más optimistas con su situación laboral, que el 70% considera “buena o muy buena”, y así el 93% de ellos creen que conservará su puesto de trabajo en los próximos años. Por el contrario, solo el 40% de los trabajadores por cuenta propia piensan que su situación es correcta.
SITUACIÓN DE LA INDUSTRIA ESPAÑOLA
La guerra en Ucrania y la subida de los precios han provocado una caída progresiva del Indicador de Clima Industrial (ICI) desde febrero de 2022, llegando a alcanzar en noviembre el valor negativo de -7,7. El Índice de Producción Industrial (INE) también se ha reducido durante este año, pasando de registrar una cifra de 4,3 en enero a solo 2,2 en octubre.
Por comunidades autónomas, Navarra, País Vasco y La Rioja son las que registran mayor peso de la industria en la economía regional, mientras que este sector es más residual en Andalucía, Baleares, Canarias y Galicia.
Cataluña es la región que más contribuye al PIB industrial nacional, con una aportación del 22%, seguida de Madrid, Andalucía y Valencia (11% cada una). Baleares, Canarias, Cantabria, Asturias, Extremadura y La Rioja registran una contribución inferior al 2,5%.
El presidente del CGE, Valentín Pich, ha enfatizado la necesidad de nuevas “políticas activas que doten de mayor peso al sector industrial” por toda la geografía española.