MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reconocido este miércoles que la tasa interanual de inflación, que se ha situado en el 9,8% este mes de marzo, “es un mal dato”, pero confía en que las medidas aprobadas por el Gobierno frente a la crisis desencadenada por la invasión rusa de Ucrania y el acuerdo para limitar el precio del gas permita “estabilizar” su evolución.
Así lo ha dicho en su intervención ante el Pleno del Congreso para dar cuenta del cambio de posición de España respecto al Sáhara Occidental y las últimas cumbres de la OTAN y del Consejo Europeo.
En concreto, el Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 3% en marzo en relación al mes anterior y elevó de golpe su tasa interanual más de dos puntos, hasta el 9,8%, su valor más alto en 37 años, concretamente desde mayo de 1985.
El presidente ha señalado que del 9,8% de alza de precios, el 73% se explica por el desbocado precio de la energía y los alimentos no elaborados y que, además, esto se ha “exacerbado por la guerra de Ucrania”.
En todo caso, ha dicho que en el Gobierno están “convencidos” de que el plan de choque económico, pero especialmente el acuerdo en la Unión Europea para poner un precio de referencia del gas e impedir que fije el resto de generación de electricidad va a “permitir en los próximos tiempos doblegar la curva y estabilizar la evolución del coste de la vida”.