MURCIA, 22 (EUROPA PRESS)
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha afirmado que la intención del Gobierno “desde el primer momento” con el nuevo impuesto temporal a la banca es que “no entorpezca el buen funcionamiento de la economía”.
En cambio, la intención sí es “que haya una mayor participación por parte de grandes grupos empresariales que puedan estar, en este momento, teniendo acceso a mayores beneficios de lo habitual”. Todo ello, añade, “en un momento en el que hay preocupación por parte de la sociedad por las dificultades que pueda estar atravesando el consumidor, la familia o la pequeña empresa”.
Durante una visita a Murcia y al ser preguntada por una valoración del impuesto a la banca, Ribera ha considerado que ella no puede hacer una “valoración mejor” que la que pueden hacer sus homólogas, la ministra de Hacienda y la de Economía.
“Es obvio que la intención a la hora de definir figuras impositivas excepcionales que aplican sobre beneficios extraordinarios que algunos de los grandes grupos empresariales, hay que definir cada uno de estos elementos y debe hacerse sin que perjudique a otros intereses muy importantes”, ha señalado.
Entre esos “intereses” ha citado “la protección de los consumidores, la inflación o la posibilidad de que siga habiendo una actividad económica, tanto en términos de acceso a la financiación o de actividad real con plena normalidad”. “Están trabajando al respecto y seguro que toman muy en cuenta las recomendaciones que creo que forman parte de la intención del Gobierno central desde el primer momento”, ha concluido.