Se han concentrado ante su sede en Bilbao y el viernes decidirán en asamblea más movilizaciones contra la salida de 356 trabajadores
BILBAO, 21 (EUROPA PRESS)
Trabajadores de Petronor se han concentrado este miércoles ante el Gobierno Vasco en Bilbao para pedir su implicación ante la aplicación del ERTE propuesto por la empresa para 356 de sus trabajadores. El comité considera que esa reducción en un tercio de la actual plantilla “pone en riesgo la seguridad” del resto de trabajadores, de las instalaciones de la planta y el medio ambiente.
Numerosos trabajadores de la refinería y de sus subcontratas han cortado durante más de media hora la circulación en la Gran Vía, a la altura del Sagrado Corazón, donde se encuentra la sede del Ejecutivo vasco, donde han coreado lemas en contra del ERTE y reclamado un aumento de las horas de formación para reducir las horas extraordinarias.
Durante la protesta, se han encendido bengalas y botes de humo entre sonidos de sirena y bocinas, con la plantilla desplegada en hileras a lo largo de los dos sentidos de la calzada. Entre los concentrados se encontraban también trabajadores de otras empresas en situación parecida, como ITP y Tubacex, estos luciendo los logos, banderas y uniformes de sus respectivas compañías.
Dos representantes del comité de Petronor, Idoia Zalbide y Javier Losa, han leído un comunicado en euskera y castellano donde han denunciado que el ERTE no está justificado y solo es “la antesala de medidas mucho más traumáticas, que, de no ser tratadas y previstas a tiempo, acabarán lastrando a plantillas y comarcas”.
El comité también ha denunciado que después de varias semanas de protestas, con el apoyo de las empresas subcontratistas, la dirección “ya ha reducido gran parte del personal eventuales y otras contrataciones acordadas”, en lo que consideran es “un ERE encubierto”.
Por todo esto, y dentro de las movilizaciones iniciadas este lunes en la propia planta de Muskiz, una representación de trabajadores se ha concentrado ante la sede del Gobierno Vasco en la capital vizcaína para trasladarle que “el único fin posible” al actual conflicto es que Petronor retire el ERTE “por motivos de seguridad de personas, medio ambiente e instalaciones”, que realice las contrataciones acordadas y aumente la formación para reducir las horas extraordinarias.
Respecto a esa denuncia del riesgo para la seguridad tanto del resto de trabajadores como en las instalaciones y el medio ambiente, el comité ha calificado de “alarmante” la decisión de la empresa de dejar vacías unidades de refinería que en cualquier momento pueden tener una situación de emergencia tanto desde el punto de vista industrial como mediombiental.
TRABAJOS PENDIENTES
Por otro lado, creen que hay “gran cantidad de trabajos de mantenimiento pendientes, como inspecciones, reparaciones, preventivos, que se dejarán de hacer debido a la afección supone el ERTE en este colectivo de empleados, cuando la vigilancia y el mantenimiento de esas unidades son fundamentales para evitar accidentes industriales.
En este último aspecto, el comité ha recordado que en 2020 se hicieron 30.000 horas extras por falta de polivalencia entre unidades y, cuando es el momento de mejorar esa polivalencia, “la dirección toma la decisión de mandar a la gente a casa”.
Asimismo, en su escrito piden a la empresa que “procure realizar una transición energética socialmente justa que provea de empleos estables y de calidad” porque son conscientes de que la nueva ley del Gobierno Vasco “supone un cambio necesario que afectará al modelo de negocio de Petronor”.
TRANSICIÓN ENERGÉTICA
Por ese motivo, y desde su punto de vista, esta nueva ley va a suponer que la refinería va a necesitar “una transformación y una evolución importante”, que se tiene que dar, entienden, “con los estándares más altos de seguridad, tanto industrial como personal y ambiental, no con recortes que paguen los trabajadores”.
Por otro lado, el comité ha anunciado que el viernes se celebrará una asamblea de trabajadores para acordar y fijar un nuevo calendario de movilizaciones para protestar contra “el sinsentido de las medidas propuestas por parte de la dirección.
A su vez, este pasado martes finalizó sin acuerdo el periodo de consultas sobre el ERTE, que afectará a un tercio de la plantilla hasta diciembre y al rechazar los sindicatos la última oferta de la compañía, que proponía complementar en un 80% el bruto de algunos conceptos salariales a las personas cuya afección sea mayor de un 80% de su jornada, reducir de 8 a 6 meses la duración del ERTE y rebajar la afección en un 20% al personal de jornada de día, ocupando ese tiempo en formación.
A la propuesta de la dirección de prolongar el proceso de consultas para valorar su última oferta, los sindicatos respondieron “no entender que se quiera prolongar el periodo de consultas”, mientras la empresa “se niega a proporcionar la información solicitada para comprender las causas”.
Por ese motivo, la representación sindical dio este martes por finalizado sin acuerdo el proceso de consultas porque no aceptan “chantajes económicos, a cambio de rebajas en la seguridad”, al tiempo que denunciaron que la dirección les hizo llegar “fuera del plazo” la información solicitada el pasado día 12 para poder profundizar en esa misma oferta.