MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Petrobras se anotó un beneficio neto atribuido de 18.625 millones de dólares (17.430 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, lo que supone recortar en un 34,4% sus ganancias respecto al mismo período del año anterior, según se desprende de su informe de resultados.
Esta caída obedece, principalmente, a la depreciación del real brasileño frente al dólar y a mayores gastos operativos, así como a menores ganancias por activos. Estos efectos fueron parcialmente compensados por menores gastos por impuestos.
Asimismo, la cifra de negocio se redujo en un 20% en términos interanuales, quedándose en los 75.302 millones de dólares (70.470 millones de euros) entre enero y septiembre de este año.
Por su parte, los costes se elevaron hasta los 9.309 millones de dólares (8.712 millones de euros), duplicando la cifra del mismo período del año anterior.
Este incremento se debe a mayores volúmenes de exportación de petróleo y a mayores ventas de productos petrolíferos en el mercado interno, especialmente diésel. Este efecto fue parcialmente compensado por los menores volúmenes de importaciones de gas natural.
En tanto, el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado cayó en un 25,6% frente a los tres primeros trimestres de 2022, situándose en los 38.944 millones de dólares (36.455 millones de euros).
En lo que se refiere a las inversiones, la petrolera destinó un 31% más de recursos a esta partidas que en los primeros nueve meses de 2022, llegando a los 9.100 millones de dólares (8.515 millones de euros). Pese al “desafiante escenario” que enfrentan los proveedores, la compañía planea terminar el año con un nivel de inversión de 13.000 millones de dólares (12.165 millones de euros), sin comprometer el objetivo de producción previsto para 2023.