MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
La empresa de productos y clases de ‘fitness’ Peloton Interactive ha anunciado un nuevo programa de reducción significativa de costes que implica el cambio del consejero delegado y el despido de 2.800 de sus trabajadores, según ha informado este martes en un comunicado.
La empresa ha decidido que el cofundador y actual consejero delegado de la empresa, John Foley, pase a ocupar el cargo de presidente ejecutivo del consejo. En su lugar, el puesto de CEO pasará a ocuparlo Barry McCarthy, que se ha sentado en los consejos de administración de varias tecnológicas en los últimos años.
Entre 1999 y 2010, el nuevo primer ejecutivo de Peloton fue el director financiero de Netflix. Tras dejar el cargo en la firma de ‘streaming’, pasó a ser consejero de Pandora, Eventbrite, Wealthfront, NatureBox o Rent The Runaway.
En 2014 se unió al consejo de administración de Spotify y un año después fue nombrado director financiero y máximo responsable del negocio gratuito de la empresa. En 2020 decidió dejar el cargo ejecutivo para volver a ser miembro del consejo. McCarthy se graduó en Historia por el Williams College y, posteriormente, cursó un máster en administración de empresas (MBA) con especialización en Finanzas en la escuela de negocios Wharton, asociada a la Universidad de Pensilvania.
“Confío en que Barry es el líder adecuado para llevar a la empresa a su próxima fase de crecimiento. No solo es reconocido como un experto en liderar modelos de negocio de suscripción (…) sino que también tiene ha tenido un tremendo éxito en asociarse con consejeros delegados fundadores de otras marcas”, ha subrayado Foley.
La otra gran pata del programa de transformación que ha anunciado la empresa es el despido de 2.800 personas, incluyendo un 20% de los cargos corporativos. Junto con otras acciones de reducción de costes, Peloton espera recortar sus gastos en 800 millones de dólares (700,5 millones de euros) anuales.
PÉRDIDAS EN EL PRIMER SEMESTRE.
Peloton ha anunciado estas medidas el mismo día que ha publicado su cuenta de resultados del primer semestre de su año fiscal, finalizado en diciembre. En los seis meses fiscales, la empresa se anotó unas pérdidas de 815,3 millones de dólares (713,9 millones de euros), frente a los beneficios de 132,8 millones (116,3 millones de euros) del mismo periodo del año anterior.
La facturación de la empresa entre julio y diciembre fue de 1.939,1 millones (1.697,8 millones de euros), un 6,4% más, mientras que los costes asociados a los ingresos se dispararon un 30,6%, hasta 1.396,2 millones (1.222,5 millones de euros) y los gastos operativos se multiplicaron por más de dos, hasta 1.328,3 millones (1.163 millones de euros).
Solamente en el segundo trimestre fiscal, las pérdidas de Peloton fueron de 439,4 millones (384,7 millones de euros), frente a los beneficios de 63,6 millones (55,7 millones de euros) del mismo periodo del ejercicio anterior. De su lado, los ingresos aumentaron un 6,5%, hasta 1.133,9 millones (992,8 millones de euros).