MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
La Organización de Consumidores de Usuarios (OCU) ha pedido a Ryanair que flexibilice su política de cancelación para los viajeros que tenga un viaje o un vuelo programado a Marrakech tras el terremoto del pasado 8 de septiembre.
En nota de prensa, la OCU señala que ha pedido a la aerolínea que “no abuse de esta situación extraordinaria” para cobrar unos importes “desorbitados” por el cambio de vuelo.
La organización destaca que “el miedo insuperable de muchos usuarios” y el hecho de que los hoteles y proveedores de servicios están cancelando de oficio es una “razón más que suficiente” para cancelar por razón de fuerza mayor las reservas.
En concreto, destacan que no se trata de una cancelación voluntaria, sino una decisión motivada por la incertidumbre sobre las consecuencias que puede tener viajar a esta región de Marruecos.
En caso de que Ryanair haga caso omiso a las peticiones de OCU, se procederá a dar traslado a la Dirección General de Consumo para que investigue y en su caso sancione las infracciones que en su caso detecte.