MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Microsoft no ha logrado evitar que la investigación abierta por la Comisión Europea siga adelante a cuenta de posibles violaciones de las reglas de competencia de la Unión Europea, después de vincular su aplicación para videollamadas Teams con la instalación del software Office, según han afirmado fuentes conocedoras del asunto recogidas por ‘Bloomberg’.
Esta situación ya fue denunciada ante Bruselas por su competidor Slack en julio de 2020 y, ante la apertura de las pesquisas el pasado 27 de julio, Microsoft confirmó en agosto que las ‘suites’ de aplicaciones de ofimática Microsoft 365 y Office 365 para clientes empresariales dejarían de incluir la solución de productividad Teams en Europa, con lo que pasaría a ofrecer nuevos planes a menor precio y Teams de forma independiente.
Entonces, se informó de que, a partir del 1 de octubre de este año, Microsoft desvinculará Teams de las dos ‘suites’ de ofimática, y pasará a ofrecer esta solución de forma libre a un precio de 5 euros al mes o 60 euros al año.
Asimismo, crecerá la interoperabilidad entre las aplicaciones y servicios de Microsoft 365 y Office 365, para que empresas como Zoom o Salesforce puedan adaptar sus servicios. También se dará soporte a los desarrolladores con nuevos recursos. El objetivo de estos “cambios proactivos” era abordar las preocupaciones de la Comisión.
No obstante, según estos informantes, no ha sido suficiente, ya que la Comisión Europea estaría preparando un informe con objeciones para la compañía que se dará a conocer en los próximos meses.
El pasado 27 de julio, la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario encargada de Competencia, Margrethe Vestager, apuntó a la importancia de garantizar que el sector “se mantenga competitivo” y que las empresas “sean libres para elegir los productos que mejor cumplen sus necesidades” ahora que herramientas de comunicación como ‘Teams’ se han vuelto “indispensables” en la actividad empresarial.
Bruselas aseguró temer que Microsoft esté abusando de su posición en el mercado y restringiendo la competencia de otros proveedores de servicios de comunicación y colaboración en la nube disponibles en el espacio económico europeo.
En particular, los servicios comunitarios querían investigar si la compañía estadounidense concede una “ventaja” competitiva de distribución a ‘Teams’ al no dar a los clientes la posibilidad de incluir o no el acceso a ese producto cuando se suscriben a los paquetes de Office 365 o Microsoft 365.
También querían aclarar si con esta práctica puede haber limitado la interoperabilidad entre sus productos ‘suites’ y otras ofertas de la competencia, ya que ello se traduciría en obstáculos anticompetitivos que impedirían a sus clientes optar por proveedores de otras herramientas similares.
ÚLTIMA INVESTIGACIÓN
Las últimas pesquisas contra la compañía de Redmond se realizaron en 2008 por abuso de posición dominante ya que se forzaba a los usuarios a descargar el buscador web Internet Explorer en sus equipos.
Bruselas y la multinacional alcanzaron un acuerdo para permitir que los clientes escogieran el navegador de su elección, pero, en 2013, la UE multó a Microsoft con 561 millones de euros por no cumplir con lo pactado.