Los ingresos cayeron un 48%
Metro de Madrid obtuvo 10 millones de euros de beneficio en el ejercicio 2020, una cifra que supone una reducción de 52 millones de euros (-83,9%) respecto a sus ganancias en 2019, año en el que la empresa pública que gestiona el suburbano ganó 62,1 millones de euros, y 53 millones de euros menos respecto a las de 2018.
“La disminución está directamente relacionada con la caída en los ingresos por transporte de viajeros de un 48% ocasionada por la crisis sanitaria del Covid-19”, ha constatado la Comunidad de Madrid en un comunicado.
A ello se suman otras consecuencias derivadas de la pandemia como la menor facturación por la comisión de venta de títulos de transporte, que ha experimentado una caída de ventas similar a la disminución de viajeros, la de los ingresos comerciales de las tiendas y la publicidad exhibida en las instalaciones por la drástica disminución del número de personas que han accedido a la red del suburbano.
Metro de Madrid ha tenido además que hacer frente a la crisis sanitaria “velando por la salud y la seguridad tanto de sus usuarios como de sus trabajadores, sin dejar de prestar servicio ni siquiera en los momentos más complicados de la pandemia”.
En este contexto, se han conseguido mantener los costes de la compañía que han experimentado una ligera disminución de 2 millones de euros.
El incremento del endeudamiento en 64 millones ha permitido hacer frente a esta situación de menores recursos generados por la compañía con una caída del resultado operativo de 55 millones de euros y preparar al suburbano para el escenario planteado en 2021 por la evolución que la demanda está teniendo en estos meses iniciales del año, que es similar a la de 2020.
UN METRO EN MARCHA FRENTE A LA PANDEMIA
Pese a la caída de la demanda, Metro ha reforzado su plantilla con la incorporación de 145 nuevos maquinistas y ha elaborado los pliegos para la adquisición de 60 nuevos trenes.
Asimismo, se han realizado inversiones por valor de 135 millones de euros destinadas a la modernización y renovación de instalaciones en línea 4 y estaciones como Plaza Elíptica, Bilbao y Alfonso XIII, que ahora también cuentan con ascensores.
Por otro lado, se han adjudicado los contratos de mantenimiento de todas las líneas de la red (a excepción de Metro Ligero 1 y el Depósito de Canillejas) contemplados dentro del Plan de Conservación, que cuenta con una inversión total de más de 35 millones de euros.