Magallanes Renovables obtiene la certificación del diseño de su plataforma de energía mareomotriz

MADRID, 18 (EUROPA PRESS)

La tecnológica española Magallanes Renovables ha obtenido de Bureau Veritas la certificación ‘Basic Design Assessment’ para su diseño de plataforma comercializable de energía mareomotriz de última generación ATIR 2.0, informó la empresa.

Magallanes Renovables es la primera empresa del sector energético mareomotriz que certifica el diseño de su plataforma comercial a este nivel para generar confianza en los desarrolladores de renovables que busquen diversificarse más allá de las intermitentes fuentes de energía eólica o solar.

El acto de entrega de la certificación tuvo lugar el pasado 15 de marzo en las oficinas de Bureau Veritas en París (Francia). Por parte de Magallanes Renovables, acudieron el consejero delegado de la firma gallega, Alejandro Marques de Magallanes; la directora técnica, Marta García, y el ‘project mánager’, Francisco Otero.

Marques de Magallanes destacó que esta certificación supone una garantía de que los diseños “cumplen con los más altos estándares de calidad y seguridad”.

Además, indicó que esta autentificación es “la llave para que un proyecto sea bancable, es decir que resulte de interés su financiación por aquellos interesados en su evolución”.

La certificación del diseño de la plataforma ATIR 2.0, derivada de cinco años de pruebas llevadas a cabo en las costas británicas con la anterior plataforma ATIR, abre las puertas a la comercialización de este importante recurso.

Fundada en 2009, la compañía centra su actividad en el desarrollo de soluciones energéticas basadas en la generación de electricidad mediante el aprovechamiento de la fuerza mareomotriz de los océanos a través del uso de plataformas flotantes dotadas de palas que recogen la fuerza de las mareas en ambas direcciones en los canales entre islas o en las bahías y otros lugares de las costas.

PLATAFORMA ATIR.

En 2019, su plataforma ATIR, de 45 metros de eslora y 15 de profundidad, inició las pruebas en las costas de Gran Bretaña y ha conseguido con éxito generar electricidad vertida a través de una conexión a la red eléctrica de Escocia.

La compañía ha obtenido de Reino Unido el respaldo necesario para la instalación del que será el primer parque flotante de energía mareomotriz del mundo, al hacerse con la tarifa energética en la subasta convocada para la producción de energía mareomotriz.

Prevé contar en 2026 con siete plataformas operativas de su nuevo modelo comercializable en dos parques que aprovecharán la energía de las mareas de Gran Bretaña para generar un suministro limpio de energía renovable permanente de en torno a los 10,5 megavatios (MW).