Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea han acordado este martes aprovechar el potencial renovable de la Península Ibérica “para contribuir a la seguridad de suministro” en el marco de la estrategia para reducir la elevada dependencia de combustibles fósiles de Moscú.
Así figura en las conclusiones de la Cumbre de líderes de la UE en las que los Veintisiete han abogado por “aprovechar el potencial de la Península Ibérica para contribuir a la seguridad y suministro de la Unión Europea” en la “capacidad de producción de energía renovable”.
En este marco, los jefes de Estado y de Gobierno han pactado mejorar las infraestructuras interconexión de gas y electricidad europeas invirtiendo en proyectos nuevos y proyectos por completar, “incluyendo el gas natural licuado (GNL) e interconexiones de electricidad y de gas preparadas para hidrógeno”, incluyendo los Estados miembro insulares.