MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
Los criptoactivos no suponen una amenaza para el sector bancario europeo y las entidades podrían encontrar oportunidades en este ámbito, dados los progresos que han hecho hacia la transformación digital, según un informe de la consultora Scope Group.
El consultor senior de Scope Group Sam Theodore explica en un comentario que si bien las preocupaciones de la banca en este sentido pueden “no ser del todo erróneas”, especialmente para las entidades rezagadas en el área digital, sí lo son para el sector en general.
“Los bancos que han hecho progresos visibles en la reestructuración digital integral y que se mantienen atentos a las megatendencias disruptoras en curso no deberían estar tan preocupados”, ha defendido Theodore, y ha añadido que los grupos pueden incluso encontrar oportunidades en este campo.
La consultora explica que, actualmente, estos activos tienen una función de depósito de valor con la que los inversores quieren hacer ‘trading’, especular e invertir y no tanto utilizarlo como un medio de intercambio, aunque cada vez más negocios estén empezando a aceptarlos como medio de pago.
“Mientras los gobiernos y los bancos centrales se nieguen a respaldarlas, las criptomonedas desempeñarán, en el mejor de los casos, un papel marginal en las transacciones”, ha sostenido Theodore.
Asimismo, Theodore ha destacado que las autoridades monetarias y los reguladores financieros parecen estar tomando en serio la creciente presencia de los criptoactivos, un hecho que considera “alentador”.
Los bancos centrales, tanto en mercados desarrollados como emergentes, se encuentran en distintas etapas de investigación e incluso implementación de sus monedas digitales, como es el caso de China, que probó el yuan digital durante las celebraciones de su año nuevo.
LOS CONTRATOS INTELIGENTES, MÁS INCÓMODOS PARA LA BANCA
Si bien los criptoactivos no suponen una amenaza para el sector en su conjunto, los contratos inteligentes o ‘smart contracts’ sí podrían ser “algo más incómodos”.
“Los bancos deberían sentirse algo más incómodos por el desarrollo de los contratos inteligentes, procesados en un libro mayor distribuido sin permisos en ecosistemas digitales abiertos como ethereum”, ha expuesto Theodore.
Para el consultor, lo que podría plantear interrogantes sería hasta qué puntos estos contratos inteligentes pueden imponerse a las transacciones financieras entre pares, ignorando a los bancos.
Sin embargo, la viabilidad de las finanzas descentralizadas es dudosa, ya que es poco probable que sea adoptado a gran escala por las empresas, sería marginal y tiene barreras regulatorias, según el informe.