A un total de 11,51 millones de euros, frente a los 6,7 millones que percibirá el directivo por su cese
MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
Los consejeros independientes de Indra propusieron a la comisión de nombramientos y retribuciones de la compañía el pasado 21 de abril, un mes antes del cese de Fernando Abril-Martorell como presidente, aumentar la indemnización a percibir por el directivo basándose en un informe encargado a la consultora Willis Towers Watson.
La propuesta, que elevaba la cuantía de la indemnización a 11,51 millones de euros, frente a los 6,7 millones que percibirá el directivo por su cese al frente de la compañía, fue frenada por la Sociedad Estatal de Paticipaciones Industriales (SEPI), que con casi el 19% del capital de Indra es el accionista mayoritario.
Según el desglose de los distintos epígrafes de la propuesta de remuneración, se propuso que Abril-Martorell pasara de cobrar 775.000 euros de retribución fija a un millón; que su bonus anual (ligado a objetivos) pasase de 1,86 millones a 2,4 millones; que el blindaje por terminación de contrato pasara de 3,1 millones a 4,8 millones; que le correspondieran 2,4 millones en vez de 2,32 millones por tener un año de incompatibilidades, y que por cese voluntario pudiese cobrar 5,43 millones en vez de 2,32 millones, según el informe de la consultora al que tuvo acceso Europa Press.
Además, se propuso que pudiera acceder a la pensión acumulada, por importe de 3,03 millones de euros, antes de cumplir los 62 años -actualmente Abril-Martorell tiene 59 años-, en contra de lo estipulado en los estatutos de la compañía.
En total, la indemnización propuesta ascendía a 11,51 millones de euros, lo que supone 4,81 millones por encima de lo que percibirá por este concepto tras su salida de la compañía.
Esta propuesta, documentada a través del informe de Willis, fue defendida por Alberto Terol como presidente de la comisión de nombramientos y retribuciones y secundada por Ignacio Martín e Isabel Torremocha, los tres de plena confianza de Abril-Martorell, informaron a Europa Press en fuentes próximas al consejo.
El consejero dominical Antonio Cuevas (representante de SEPI) expresó en esa y en posteriores reuniones donde se abordó la mejora del blindaje a Fernando Abril-Martorell la clara oposición de SEPI a la misma.
Cuevas también se opuso a la subida de sueldos propuesta para el consejo, entre otras razones por las pérdidas de 65 millones registradas por Indra en 2020 y porque se produce después de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) y reducciones de plantilla planteados por la dirección de la compañía en los últimos años, y coincidiendo además con las críticas formuladas desde el Gobierno a las prácticas de algunas compañías de impulsar ajustes laborales a la vez que se promueven mejoras en la retribución de sus cúpulas.
Cabe recordar que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), dependiente del Ministerio de Economía y que posee el 16% de CaixaBank, votó en la pasada junta de accionistas, celebrada el 26 de abril, en contra de la política retributiva de esta entidad, por la cual el presidente, José Ignacio Goirigolzarri, pasaba de percibir 500.000 euros en Bankia a 1,65 millones de euros en la entidad fusionada, que acaba de presentar un ERE sobre 7.791 empleados.
El consejo de administración de Indra nombró el pasado jueves a Marc Murtra presidente no ejecutivo de la compañía en sustitución de Abril-Martorell, que sí tenía funciones ejecutivas.
En consecuencia, el consejo ha delegado las funciones ejecutivas del nuevo presidente en Ignacio Mataix y Cristina Ruiz, responsables respectivamente de las divisiones de Transporte y Defensa y Minsait, quienes han sido nombrados consejeros delegados.