MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
Línea Directa ha lanzado como parte de su seguro de Hogar una cobertura específica frente a la ocupación ilegal de la vivienda que ofrece asistencia legal para el proceso de recuperación del inmueble y una “amplia” compensación al asegurado por los costes económicos que soporta por la pérdida temporal de su vivienda por un precio fijo de diez euros al mes, adicional al precio del seguro de hogar.
Todos los servicios incluidos en esta cobertura ‘antiokupación’ suman 33.900 euros, una cantidad que puede elevarse en caso de que el cliente opte por realizar la rehabilitación de la casa a través de la red de reparadores de Línea Directa.
La nueva cobertura de la póliza de hogar ofrece, desde el punto de vista de la asistencia jurídica, asesoramiento legal telefónico “ilimitado” y la reclamación de la vivienda por vía amistosa o judicial.
Para ello, una vez notificada la ocupación y antes del inicio de las gestiones judiciales, Línea Directa realizará a través del servicio de asistencia legal hasta tres intentos de gestión extrajudicial para lograr el abandono de la vivienda ocupada ilegalmente. Si esta vía amistosa falla, se iniciará el procedimiento por la vía judicial.
En este sentido, la reclamación realizada por Línea Directa cubre hasta 10.000 euros en gastos legales y jurídicos, incluidos los del letrado, los notariales, los derechos y aranceles del procurador, honorarios y gastos de perito, costas y tasas judiciales. La cobertura contempla además la libre elección de abogado.
La compañía se hace cargo también de la habilitación de la vivienda, pudiendo elegir el asegurado entre la prestación del servicio sin límite económico por profesionales de Línea Directa o un reembolso de hasta 5.000 euros. Esta prestación incluye el cambio de cerradura, pintado de la vivienda, limpieza o vaciado de muebles y reparación de pequeños desperfectos, así como la mano de obra por servicios de fontanero, albañil, cristalero, electricista, parquetista y del servicio técnico de electrodoméstico.
Asimismo, el propietario recibirá hasta 300 euros al mes durante seis meses para hacer frente al pago de las facturas de agua, luz y gas por los consumos hechos en su vivienda habitual durante el tiempo de ocupación.
En caso de que la vivienda ocupada constituya la vivienda habitual del asegurado y necesite una alternativa de alojamiento, se la abonará también hasta 800 euros al mes durante seis meses para arrendar otra casa. El propietario recibirá la misma cuantía y durante el mismo periodo de seis meses en caso de que la vivienda estuviese dedicada al alquiler, no pudiese alquilarla y dejara de ingresar las rentas mensuales de ese arrendamiento.
Las indemnizaciones que el asegurado deba afrontar por los daños causados a terceros como consecuencia de la ocupación, como por ejemplo daños de agua a otros vecinos del mismo edificio, serán cubiertos con hasta 7.500 euros en concepto de responsabilidad civil.
Esta cobertura protege al propietario en los casos, por un lado, de allanamiento de morada, esto es, cuando su hogar, independientemente de que sea primera o segunda vivienda, sea ocupado. Por otro, abarca también la usurpación de un inmueble deshabitado o vacío, por ejemplo, una vivienda en construcción o en proceso de venta.
Los nuevos clientes que quieran contratar un seguro de hogar y asegurados actuales de Línea Directa de este producto podrán añadir esta nueva cobertura a su póliza de hogar de forma opcional por diez euros al año. Al respecto, el director comercial de la aseguradora, Diego Ferreiro, ha explicado en rueda de prensa que se trata de un precio “fijo” para toda España, por lo que no se trata de una promoción de lanzamiento.
La directora de Personas, Comunicación y Sostenibilidad de Línea Directa, Mar Garre, ha asegurado que se trata de un producto “innovador”. “No hay ningún producto en España que cubra lo que cubre Línea Directa. Aborda situaciones que no están contempladas en ninguna otra póliza”, ha añadido.
Por otro lado, Ferreiro ha reconocido que la nueva ley de vivienda, aprobada recientemente, podría alargar el tiempo de recuperación ya que exige trámites adicionales que no existían hasta ahora, como pueden ser la acreditación de vivienda habitual o de vulnerabilidad. Sin embargo, ha afirmado que todavía “es pronto” para sacar conclusiones y hay trámites “que no están claros del todo” y dependen de “decisiones regionales”.
En cuanto al tiempo medio que dura un proceso de recuperación, Ferreiro ha señalado que, sin datos oficiales, dura entre seis y nueve meses. Además, ha indicado que esta nueva cobertura solo es para propietarios, por lo que no cubre a inquilinos que vivan en una vivienda en régimen de alquiler.