MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Asociación Internacional de la Energía (AIE) han instado a los gobiernos a que eleven sus inversiones en infraestructuras energéticas sostenibles debido al entorno actual de incrementos de precios de la energía.
En un comunicado, ambos organismos multilaterales han alertado a los países de que no deberían aumentar el apoyo a los combustibles fósiles como respuesta a la actual crisis energética o al impacto económico de la pandemia. En su lugar, deberían “acelerar” las inversiones para proyectos sostenibles y para crear “empleos verdes”.
“A medida que la actividad económica y la demanda de combustible repuntan, debemos asegurarnos de que el apoyo a combustibles fósiles sigue cayendo y que el gasto en la recuperación del Covid-19 se centra en medidas que son positivas para el medio ambiente y el clima”, ha indicado el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann.
De su lado, el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, ha apostillado que “el mundo necesita un incremento en la inversión en tecnologías de energía limpia”. En su opinión, es una condición “esencial” que se eliminen los subsidios a combustibles fósiles.
Según datos elaborados por la OCDE y la AIE, durante 2020 el apoyo público a producción y uso de combustibles fósiles entre las principales economías del mundo alcanzó los 351.000 millones de dólares (302.527 millones de euros), un 29% menos que en 2019 por la caída de la actividad económica tras la pandemia y por los excesivamente bajos precios del crudo.
“Las medidas de recuperación del Covid-19 que se están implementando en todo el mundo ofrecen una oportunidad para derivar recursos públicos a áreas que apoyen los objetivos climáticos y medioambientales”, han esgrimido ambas organizaciones.