MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La Junta Europea de Riesgo Sistémico (JERS) ha insistido en que los riesgos para la estabilidad financiera en la Unión Europea siguen siendo “elevados”, según se desprende del comunicado emitido este jueves haciéndose eco de la cumbre ordinaria celebrada el pasado 30 de noviembre.
Así, la JERS ha asegurado que, de cara al futuro, varios factores siguen pesando sobre las perspectivas de estabilidad financiera, dado que la incertidumbre y los riesgos a la baja para el crecimiento han aumentado en los últimos meses, debido, entre otros factores, al incremento de las tensiones geopolíticas.
“En particular, el difícil entorno macroeconómico podría crear tensiones en los balances de los hogares y de las sociedades no financieras, ya que la capacidad de la política fiscal para apoyar a estos sectores es más limitada que en el pasado”, ha explicado.
La JERS ha subrayado que la elevada volatilidad de los mercados de renta fija y la posibilidad de un “ajuste desordenado de los mercados financieros” podría verse amplificado por el elevado riesgo de crédito y de liquidez en el sector de intermediación financiera no bancaria.
Según la JERS, el sector bancario sigue beneficiándose de una “fuerte rentabilidad” y una “sólida liquidez de financiación”, pero la incertidumbre también pesa sobre sus perspectivas.
En primer lugar, la debilidad del entorno macro puede afectar a la calidad de los activos, en concreto, en el caso de los bancos con una elevada exposición a los préstamos al consumo y al sector inmobiliario comercial (SIC). En segundo lugar, se prevé que los costes de financiación bancarios afecten a los ingresos netos por intereses, y, en tercera instancia, es “probable” que la reducción de la demanda de crédito y el escaso crecimiento futuro reduzcan el volumen de préstamos a los hogares y a las sociedades no financieras.
En este sentido, la junta ha advertido también sobre “las recientes tensiones” en los SIC de varios países miembro al ser este área “particularmente vulnerable” al endurecimiento de las condiciones financieras y por sus “modestas perspectivas de crecimiento” ante el cambio de paradigma del comercio electrónico, el teletrabajo o los nuevos estándares de construcción.
Por otra parte, los mercados de la vivienda se han desacelerado en muchos de los países analizados, y, en algunos, se ha producido una “corrección ordenada” de sus precios y de los préstamos hipotecarios. Sin embargo, el nivel de vulnerabilidades acumuladas, que obedecen al elevado endeudamiento de los hogares y la sobrevaloración de los precios de la vivienda, sigue siendo alto o medio en la mayoría de países.
La JERS, de esta forma, ha considerado “crucial” que las autoridades micro y macroprudenciales continúen supervisando el impacto de un entorno financiero “cambiante” sobre la estabilidad, con vistas a ajustar las respuestas políticas según proceda.