La Reserva Federal se plantea la posibilidad de llevar a cabo una política “restrictiva”para luchar contra la inflación, aunque de momento, mantienen su intención de elevar los tipos en medio punto en junio y julio.
Según se desprenden de las actas de la FED que se publicaban este miércoles, los miembros del Banco Central consideran que estos movimientos agresivos podrían ofrecer flexibilidad para cambiar de marcha, más adelante, si fuera necesario. Al mismo tiempo, destacan el firme compromiso y determinación de la FED de alcanzar la estabilidad de precios. Las actas recogen la incertidumbre sobre las posibles fallas en los mercados financieros, así como sobre el nivel de los tipos de interés que podría reducir la demanda, mientras los funcionarios luchan contra la inflación más alta en 40 años.
Las referencias a la posibilidad de adoptar una política restrictiva también indican que los funcionarios no se detendrán hasta que la inflación vuelva a encaminarse hacia su objetivo del 2%. Es una estrategia que indica que la política dependerá más de los datos después de las reuniones de la Fed de junio y julio.