La Reserva Federal de Estados Unidos se prepara para reducir su abultado balance en 95.000 millones de dólares, unos 87.188 millones de euros, al mes a partir del verano. Así se desprende de las actas de la última reunión de política monetaria,publicadas este miércoles.
El plan de reducción de activos se produce en un momento en que el banco central de EE.UU. podría subir los tipos de interés un 0,5% en futuras reuniones para hacer frente a la inflación. Con todo, aún no se ha tomado una decisión definitiva, y solo se han examinado las opciones. Los banqueros centrales sí acordaron que, dada la situación actual, la reducción del balance debería ser más rápida que la que tuvo lugar entre 2017 y 2019. Los participantes en la reunión estuvieron de acuerdo en que sería conveniente reducir las reinversiones mensuales de los activos que venzan para que el balance se contraiga en 60.000 millones de dólares, en el caso de los bonos del Tesoro, y en 35.000 millones, en caso de las titulizaciones hipotecarias.
También acordaron que estos límites deberían comenzar a aplicarse en los próximos tres meses, por lo que el inicio de estas reducciones podría producirse en junio o julio. El proceso de reducción del balance podría empezar a producirse en mayo.
