La compañía estadounidense de alimentación Kraft Heinz y dos exejecutivos de la misma han llegado a un acuerdo con el regulador financiero del país, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) para zanjar el caso de manipulación contable en el que se vio envuelto por un total de 76,6 millones de dólares (64,5 millones de euros).
Los exejecutivos involucrados Eduardo Pelleissone, exdirector de operaciones, y Klaus Hofmann, exdirector de compras. La empresa ha aceptado pagar 62 millones de dólares (52,2 millones de euros), sin aceptar ni rechazar los cargos de manipulación contable que le imputaba la SEC. Pelleissone ha aceptado pagar 14,2 millones (12 millones de euros en concepto de daños y 300.000 dólares (252.584 euros) de multa civil.
De su lado, Hofmann ha aceptado pagar una multa civil de 100.000 dólares (84.195 euros) y la prohibición de ejercer como consejero o máximo directivo de cualquier empresa cotizada durante un periodo de cinco años.
Según el relato de la SEC, desde el último trimestre de 2015 y finales de 2018, Kraft Heinz realizó varias malas prácticas contables, desde incorporar en las cuentas descuentos irreales procedentes de proveedores hasta mantener contratos de suministro “falsos y engañosos”. Todo ello redujo de forma indebida los costes de los bienes vendidos durante el periodo.
“Los inversores confían en que las empresas cotizadas sean un 100% sinceras y certeras en sus comunicados públicos, especialmente en lo que se refiere a sus finanzas. Cuando fallan en este aspecto, hacemos que rindan cuentas”, ha subrayado el director de la división de cumplimiento normativo de la SEC, Gurbir Grewal.