Alerta de que el déficit público podría alcanza el 4,3% si no se retiran las medidas anticrisis
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
El Instituto de Estudios Económicos (IEE) prevé una moderación del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2024, hasta el 1,5%, y ha alertado de que la evolución económica el próximo año “irá de más a menos”.
El presidente del Instituto de Estudios Económicos, Íñigo Fernández de Mesa, y su director general, Gregorio Izquierdo, han presentado el informe semestral de Coyuntura Económica del Instituto de Estudios Económicos titulado ‘Hay que crear un clima favorable a la empresa y a la inversión para garantizar el progreso de la economía española’.
A pesar de las expectativas de una mayor estabilidad en 2024, el Instituto ha alertado de que aún persisten riesgos, como las tensiones geopolíticas y posibles efectos de segunda ronda debido a incrementos salariales, así como el mantenimiento de una política fiscal expansiva.
Por ello, el IEE estima que la economía española en 2024 puede crecer un 1,5%, aunque el ejercicio irá “de más a menos”. De su lado, espera que la inflación retome una senda de moderación paulatina y se situé por debajo del 3% a finales de 2024, al igual que el IPC subyacente, pese a que puedan revertirse en este periodo las medidas antiinflación aprobadas.
El IEE no anticipa más incrementos en las tasas de interés, y se proyecta que la economía mundial retome un camino de crecimiento más sólido. Esto beneficiará a los fundamentos del consumo, que se espera que sigan siendo el soporte de crecimiento en 2024, a la inversión, a pesar de las dudas sobre su comportamiento futuro, y la exportación, que dependerá en gran medida de la competitividad de España y de la Unión Europea, en un contexto donde el comercio internacional está perdiendo impulso.
ALERTA SOBRE EL IMPACTO DE LA REDUCCIÓN DE JORNADA LABORAL
En este contexto se seguirá creando empleo, si bien a tasas moderadas (alrededor del 1%), y la tasa de paro se irá reduciendo paulatinamente.
De igual forma, el IEE considera que la traslación de la inflación a los salarios se verá limitada por el Acuerdo de Negociación Colectiva, aportando cierta certeza sobre las rentas salariales y contribuyendo a la estabilidad social en los próximos años.
Sobre lo que ha alertado el Instituto es de los efectos de la futura reducción de la jornada laboral. En su opinión en 2024 no afectará de forma significativa, pero han advertido de que es una variable que “no ayuda a la creación de empleo a largo plazo”.
Respecto a las vacantes, el IEE también ha advertido de que hay un problema en la economía española incuestionable, que es que existe una tasa de desempleo todavía importante, pero sin embargo hay múltiples sectores que están encontrando dificultades para encontrar maniobra adecuada.
“VULNERABILIDAD DE LAS FINANZAS PÚBLICAS”
En cuanto a las finanzas públicas, el IEE estima un desequilibrio fiscal público superior al 3,8% en 2024, mientras que el Plan Presupuestario del Gobierno 2023-2024 mantiene un déficit objetivo del 3% para 2024. Desde el IEE han alertado de que el déficit público podría llegar hasta el 4,3% si no se retiran las medidas para hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania y la subida de precios.
Además, el ‘think tank’ de CEOE ha advertido de que en la última década España se ha quedado rezagada respecto a sus socios de la eurozona en su desarrollo de la inversión empresarial. Según han alertado, en la actualidad, la inversión en bienes de equipo no ha recuperado aún los niveles alcanzados durante el periodo precrisis de la Covid-19, siendo inferior en un 5% a la registrada en este periodo.
“Este proceso se ha agudizado por otros factores como el empeoramiento de las expectativas, la evolución de las rentas empresariales y el contexto de continua incertidumbre que afronta nuestra economía”, han denunciado.
En este sentido, se avisa de que existen ciertos obstáculos como son la excesiva dimensión del sector público, las elevadas cargas tributarias y el fuerte desequilibrio fiscal, que lastran la inversión.
Así, el IEE ha señalado la reactivación de la inversión empresarial está condicionada a que se garantice la seguridad jurídica, se produzca una mejora del funcionamiento de los mercados y se refuercen las expectativas empresariales, promoviendo los principios de libertad económica y libertad empresarial.
Por ejemplo, el IEE ha cargado contra los impuestos a banca y energéticas aprobados por el Ejecutivo. Desde el instituto consideran que “lo mejor” que podría suceder es que estos impuestos se eliminaran dentro del sistema fiscal porque “para lo que recaudan generan mucha distorsión y, sobre todo, generan desconfianza”.
Con todo, el IEE ha señalado que en el periodo reciente, la incertidumbre empresarial habría aumentado con motivo del futuro desarrollo de la política económica derivado de los compromisos para la formación del nuevo Gobierno.
“Sus implicaciones en términos de aumento del gasto estructural, aumento de la presión fiscal y de otros costes, como los laborales, introducen un factor de presión adicional sobre los márgenes empresariales y dificultan la recuperación de la inversión empresarial”, han apuntado.
Además, han denunciado que España sigue siendo uno de los países europeos con mayores cotizaciones sociales pagadas por las empresas en porcentaje del PIB (un 9,9% del PIB en 2021 frente al 7,3% de promedio en la UE). “Ello perjudica a la competitividad de las empresas frente a nuestros competidores”, han alertado.
PIDEN REFORMAS ESTRUCTURALES
Por último, el IEE considera que España debe acometer reformas estructurales que mejoren nuestra productividad de los factores y nuestra competitividad internacional en términos de transición energética, digitalización, demografía e innovación.
“Resulta conveniente señalar que estos proyectos podrían estar financiados con los fondos Next Generation EU, pero se debe velar por su buena asignación y por la eficiencia del gasto público”, han insistido.
En su opinión, el mero anuncio de este tipo de reformas estructurales operaría cambios positivos en el corto plazo sobre la inversión empresarial al mejorar las expectativas empresariales.