El Ejecutivo, que plantea un alza de entre 12 y 19 euros, tomará su decisión tras este encuentro, previsiblemente con el rechazo de CEOE
El Ministerio de Trabajo se reunirá este mediodía con representantes de CCOO, UGT, CEOE y Cepyme para tratar de pactar la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de este año y la que debería experimentar en 2022 y 2023 para cumplir el compromiso de legislatura de llevarlo al 60% del salario medio, según han informado a Europa Press en fuentes de la negociación.
Se trata de la reunión “definitiva” sobre este asunto, pues la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ya ha dicho que la decisión del Gobierno sobre cuánto subirá el SMI este año se tomará tras este encuentro y se aplicará “rápidamente”.
Así, haya o no acuerdo con los agentes sociales, Díaz ha asegurado que habrá subida del SMI, ya que es “la herramienta más eficaz para combatir la pobreza”. En principio, según fuentes del Ejecutivo consultadas por Europa Press, el aumento del SMI no podría aprobarse en el Consejo de Ministros ordinario del martes, pues antes debe pasar por la Comisión Delegada de Asuntos Económicos, pero sí verá la luz este mes.
Actualmente el SMI se encuentra en 950 euros mensuales por catorce pagas y la intención del Gobierno es subirlo para lo que queda de año entre 12 y 19 euros al mes, lo que supondría un incremento en valores relativos de entre el 1,2% y el 2%. Esta horquilla seguiría las recomendaciones del informe sobre el SMI realizado por una comisión de expertos y publicado el pasado mes de junio.
Aunque la senda que quiere seguir el Gobierno es la de incrementar el SMI entre 12 y 19 euros este año, los sindicatos han asegurado que se les planteó en la reunión que mantuvieron las partes el pasado lunes un aumento de 15 euros este año y de 31 euros tanto en 2022 como en 2023. De cumplirse esas cuantías, el SMI alcanzaría los 965 euros mensuales este año, los 996 euros al mes en 2022 y llegaría en 2023, a final de legislatura, a 1.027 euros mensuales.
Pese a que el Gobierno no tiene la obligación de pactar la subida del SMI con sindicatos y empresarios, sólo la de consultarles, la ministra Díaz quiere lograr un nuevo acuerdo del diálogo social. No obstante, esta vez parece difícil ante el rechazo de la CEOE a subir ahora el SMI, cuando las empresas aún están intentando salir de la crisis.
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha advertido de que aumentar en este momento esta renta mínima podría perjudicar el empleo, elevar la economía sumergida y afectar negativamente a los sectores donde más se utiliza el SMI: el campo y el del servicio doméstico. Aunque la patronal se opone a subir el SMI en 2021, se ha mostrado “abierta” a analizar el escenario de esta renta para 2022 y 2023.
SUBIDA INSUFICIENTE PARA LOS SINDICATOS
Tras la reunión de mañana, el Gobierno fijará la subida del SMI para este año, aunque también espera que en este encuentro se pueda pactar la senda de subidas para 2022 y 2023, para la que prevé seguir igualmente las recomendaciones del comité de expertos.
De momento, los sindicatos consideran insuficiente el planteamiento que les ha trasladado Trabajo. El vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Mariano Hoya, considera que al menos debería aplicarse este año un alza de 25 euros, una subida que ven moderada, sensata y prudente y que se ajusta a la situación real de la economía.
Para Mariano Hoya, es el momento de “dar seguridad y estabilidad” a las empresas y trabajadores con un acuerdo que vaya hasta 2023 y que sitúe el SMI en el 60% del salario medio en España. “El Gobierno tiene que ser más valiente y subir más el SMI de una manera suficiente y digna”, dijo tras la reunión del lunes pasado.
Por su parte, la secretaria de Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente, ha advertido de que la propuesta del Gobierno no garantiza el mantenimiento del poder adquisitivo en 2021 y espera que esto mejore en el encuentro de mañana.