El líder de la patronal ve un “error” la propuesta de Sánchez sobre el SMI y avisa del peligro de hacer promesas con una deuda pública tan alta
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha afirmado este jueves que el debate que se está generando en torno a la posible derogación o modificación de la reforma laboral si gobierna el PP tras el 23 de julio igual resulta innecesario, pues el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ya ha dicho que la respetará.
“Yo he oído decir al señor Feijóo que, en principio, no va tocar este tema. Es que lo digo porque igual estamos generando un debate que no está ahí. Ahora, como todo en la vida, hay cosas que se pueden mejorar”, ha dicho el dirigente empresarial en un seminario de la APIE en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
No obstante, ha indicado que la base, de la reforma está ahí y es fruto de un acuerdo que, a nivel interno, sólo recibió dentro de la CEOE tres o cuatro abstenciones y ningún voto en contra.
“Cuando haya un nuevo gobierno, si quiere plantear algo, nos lo dirá. Y hoy por hoy, que yo sepa, no he visto al PP ni a su líder decir nada. He oído que, en principio, respetan la reforma laboral. Eso es lo que he oído por lo menos estos días”, ha apuntado el líder de la patronal.
Garamendi ha recordado que la reforma laboral también fue una respuesta a una serie de exigencias de Bruselas, como la necesidad de reducir la temporalidad, y que eso, por tanto, debe tenerse en cuenta.
El presidente de la CEOE cree que se llegó a un buen acuerdo para la reforma del mercado laboral, con “un punto de estabilidad en el tiempo” y que proporciona, además, paz social.
Para Garamendi, la pregunta no es si la reforma laboral se va a cambiar o no, sino por qué cambió unilateralmente el Gobierno de Pedro Sánchez el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores para volver a judicializar los expedientes de regulación de empleo (ERE).
“Y nosotros, lógicamente, el día que se pueda, diremos que se cambie, porque eso no se pactó”, ha apuntado.
LA NUEVA PROPUESTA DE SÁNCHEZ SOBRE EL SMI, UN “ERROR”
Preguntado por la propuesta que lanzó ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de fijar por ley que el salario mínimo interprofesional (SMI) debe ser siempre equivalente al menos al 60% del salario medio, Garamendi cree que un planteamiento que no incluye al diálogo social es un “error”.
“La ley es verdad que dice que (fijar el SMI) es una facultad del Gobierno, pero la ley dice previa consulta a los agentes sociales. Bueno, pues vamos a ver, porque lo que se está diciendo es que me cargo la segunda parte de la ley, que es la consulta a los agentes sociales”, ha apuntado.
Garamendi ha recordado que el SMI tiene “mucha incidencia” según el sitio o el sector, ha denunciado que sigue sin implementarse en los contratos públicos la actual cuantía del SMI, sin que exista posibilidad de que la empresa se salga del contrato.
Frente a la posición del dirigente empresarial, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha afirmado en este mismo foro que le parece “bien” garantizar que en España se va a cumplir la Carta Social Europea que recomienda que el SMI sea el 60% de la media salarial.
“Compartimos que se garantice legalmente que eso va a ser así. Pero a nosotros en ningún momento se nos ha comunicado nada al respecto. Yo me alegro de que se hagan este tipo de propuestas porque algunos de los acuerdos de salario mínimo interprofesional nos han costado Dios y ayuda sacarlos adelante, con lo cual si la ley nos da una palanca para que esto sea así, pues mejor”, ha opinado Sordo.
En su opinión, es “muy importante” que en España los salarios mínimos no vuelvan a sufrir las devaluaciones salariales que padecieron en anteriores crisis, lo que puede quedar solucionado si se establece legalmente que no pueden ser inferiores al 60% del salario medio.
GARAMENDI ADVIERTE SOBRE LA DEUDA Y EL DÉFICIT PÚBLICO
Durante su intervención en este seminario, Garamendi ha advertido además de que el próximo Gobierno deberá hacer frente al incremento de la deuda y el déficit público. “Vamos a tener un déficit del 4,5%. Estamos hablando de 60 ó 70.000 millones de euros más de agujero o de deuda. Y eso hay que verlo. Ese es el problema real de España”, ha indicado.
El líder de la CEOE cree que el próximo Gobierno tendrá que ver qué hace para mejorar esta situación y cómo recorta el gasto público en lugar de seguir metiendo “impuestos a la carta”.
“No estoy hablando de un austericidio, pero, por ejemplo, en vez de mandar a la gente de vacaciones en tren, pues podemos financiar becas, no duplicar competencias, reducir también muchas sociedades que están por ahí mezcladas”, ha sugerido.
“La realidad es que ahí está la deuda, la realidad es que los tipos de interés están ahí arriba, la realidad es que Europa es lo que nos va a pedir el año que viene. Con muchas de las promesas que se hagan, cuidado, porque vendrá el 1 de enero y sea el gobierno que sea, Europa le va a exigir y le va a pedir una serie de medidas”, ha avisado.