MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Eurizon Asset Management ha presentado este viernes sus perspectivas de los mercados emergentes de cara a la recta final del año, de las que se extrae que mantienen su optimismo, en tanto que en 2024 se impondrán como temas estructurales las tasas de crecimiento e inflación, así como el desarrollo en particular de China.
La firma ha señalado en el informe que, pese a un comienzo abrupto del último trimestre del presente año -“siguiendo la tónica volátil instaurada tras la escalada de las tensiones internacionales y sus posibles implicaciones”, ha matizado el estudio-, los activos de los mercados emergentes han mostrado una “excelente capacidad de resiliencia”.
Además, el estudio, firmado el consejero delegado de Eurizon SLJ, Stephen Li Jen, ha agregado que con la inflación en máximos y el giro en las políticas de los bancos centrales, es probable que el capital mundial vuelva a dirigirse hacia los mercados emergentes.
En ese sentido, el endurecimiento preventivo de los bancos centrales de países emergentes, llevado a cabo “muy por delante” del de los mercados más desarrollados, ha dado lugar a niveles significativos de potencial en los activos.
Por todo ello, Li Jen ha identificado como pivotes del mercado en 2024 al crecimiento económico -toda vez que “la perspectiva de una profunda recesión mundial es improbable” y la ralentización económica “será beningna”- y prevé una expansión económica impulsada por la tecnología y la rivalidad entre Estados Unidos y China.
Los mercados emergentes, por tanto, deberían verse beneficiados por contexto macroeconómico mundial estable, así como por el probable cambio de rumbo de las políticas monetarias locales, según la gestora.
Por otra parte, la inflación permanece como un elemento a seguir en el próximo ejercicio, si bien desde Eurizon pronostican que los factores deflacionistas de las últimas décadas, como la demografía y la tecnología, permanecen intactos y es probable que reafirmen la presión a la baja sobre los precios.
Por último, el gigante de la región, China, seguirá marcando el ritmo del continente, en tanto que la moderación de su ha sido un “lastre importante” para muchas economías de mercados emergentes en los últimos años.
Asimismo, la firma ha valorado que la reapertura económica del país tras la pandemia es un “hecho positivo”, sin embargo, hasta ahora “la estrechez de su recuperación ha sido una decepción”.
En esa línea, Li Jen ha apuntado que se necesita más de los responsables políticos de Pekín para rejuvenecer el sector inmobiliario y, por extensión, la confianza de los hogares y el consumo; con todo, se declaran optimistas desde Eurizon en cuanto a la adopción de medidas políticas significativas y concluyen que “no todo son malas noticias en China”.