MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La tasa de desempleo de Estados Unidos se elevó en dos décimas en el mes de agosto, hasta situarse en el 3,7%, según se desprende de las cifras publicadas este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo estadounidense.
De esta forma, la tasa se aleja del mínimo alcanzado antes de la pandemia. En febrero de 2020, antes del impacto del Covid-19 en el país, la tasa de desempleo se situó en el 3,5%, lo que ya entonces era un mínimo desde hace varias décadas.
Durante el octavo mes de 2022, el mercado laboral del país mantuvo su rumbo positivo con la creación de 315.000 puestos de trabajo no agrícolas, 211.000 menos que los generados durante el mes de julio.
El país ha cerrado agosto con 152,744 millones de trabajadores no agrícolas, lo que supone un alza de 240.000 puestos de trabajo en comparación con el nivel de empleo observado en febrero de 2020, antes de que la pandemia del Covid-19 empezara a afectar al país.
La cifra de parados de larga duración, aquellos que han permanecido en situación de desempleo por un mínimo de 27 semanas, se elevó en 70.000 personas, hasta los 1,137 millones de parados. Su peso con respecto al total de desempleados se redujo una décima, hasta el 18,8%.
La cifra total de personas en el paro, incluyendo puestos agrícolas, se elevó en 344.000 desempleados en el mes de agosto, hasta situarse en un total de 6,014 millones de personas.
Por grupos de trabajadores, la tasa de paro entre los hombres adultos se elevó en tres décimas, hsata el 3,5%, mientras que entre las mujeres avanzó dos décimas, hasta el 3,3%. Los jóvenes (entre 16 y 19 años) registraron una tasa de paro del 10,4%, 1,1 puntos menos que en el mes anterior.
Los puestos de trabajo no agrícolas creados en el mes de agosto son el resultado de las 308.000 contrataciones netas del sector privado y del aumento de plantillas en 7.000 personas del sector público.
Por sectores económicos, las empresas de servicios profesionales y de educación y sanidad elevaron la contratación en 68.000 personas en ambos casos, mientras que las empresas de comercio minorista aumentaron sus plantillas en 44.000 trabajadores y las de hostelería y turismo contrataron a 31.000 personas.
La duración de la semana laboral media se redujo en una décima, hasta las 34,5 horas, mientras que los ingresos medios por hora crecieron en 10 centavos, hasta los 32,26 dólares.
La Oficina ha revisado a la baja los datos de nóminas no agrícolas de junio hasta 293.000 empleos creados (105.000 menos), mientras que el dato de julio se ha ajustado a 526.000 personas (2.000 menos).