MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
España contaba en 2020 con 236.100 individuos con grandes patrimonios, aquellos con activos de inversión de al menos 1 millón de dólares (843.630 euros), excluyendo la residencia principal, los bienes de colección, los bienes de consumo y los bienes de consumo duraderos, según los datos del ‘Informe de Riqueza Mundial’ de Capgemini.
De este modo, España se situaba en el puesto 15 entre los países con mayor número de grandes fortunas, una posición por debajo del lugar ocupado en 2019, cuando se contabilizaron 235.400 grandes patrimonios españoles.
Asimismo, el número de grandes fortunas contabilizado en España en 2020 implica un crecimiento del 72% respecto de los 137.300 grandes patrimonios en el país en 2011, según los datos del informe.
A nivel mundial, el número de grandes fortunas se situó en 2020 en 20,8 millones, frente a los 19,6 millones de 2019, con Norteamérica a la cabeza, con unos 7 millones de grandes patrimonios, por delante de Asia Pacífico, con 6,9 millones; Europa, con 5,4 millones; Oriente Próximo, con 0,8 millones; Latinoamérica, con 0,6 millones; y África, con 0,2 millones.
De este modo, el número de individuos con un elevado patrimonio neto (HNWI) creció un 6,3% en 2020, mientras que su patrimonio aumentó un 7,6%, hasta alcanzar los 79,6 billones de dólares (67,1 billones de euros).
En este sentido, los autores destacan que el impulso relacionado con la subida de los mercados de renta variable y los estímulos gubernamentales, llevo a Norteamérica a superar a Asia-Pacífico (APAC) tanto en número de grandes fortunas como en el importe de su patrimonio.
Durante 2020, el segmento de los ultramillonarios, aquellos con al menos 30 millones de dólares (25,3 millones de euros) lideró el crecimiento global de la población y el volumen de riqueza de las grandes fortunas, con un 9,6% y un 9,1%, respectivamente, mientras que los millonarios próximos y los millonarios de nivel medio tuvieron un crecimiento de la población y de la riqueza menor, en torno al 6% y el 8%, respectivamente.
Por otro lado, con el actual repunte del mercado bursátil, las grandes fortunas también buscan diversificar su cartera con inversiones alternativas.
En este sentido, Capgemini destaca que la inversión sostenible está madurando, ya que el 43% de los ultramillonarios y el 39% de las grandes fortunas más jóvenes (con un máximo de 40 años) es propenso a solicitar una puntuación ESG para los productos ofrecidos.
Además, el 72% de individuos con grandes fortunas encuestados afirma haber invertido en criptomonedas y el 74% en otros activos digitales como nombres de dominio de sitios web o aplicaciones. Las sociedades de adquisición con fines especiales (SPAC) son cada vez más populares, mientras que los tokens no fungibles (NFT) están ganando poco a poco credibilidad como activos.
“El sector de la gestión de patrimonios debe ampliar sus fronteras para la atención de los clientes y prestar un mejor servicio a las grandes fortunas acostumbradas a la comodidad y la personalización de BigTech”, afirma Anirban Bose, director general de la Unidad de Negocio Estratégico de Servicios Financieros y miembro del consejo ejecutivo del Grupo Capgemini.
“Invertir en tecnología y talento es una necesidad crítica para que las empresas de gestión de patrimonios mantengan su cuota de mercado a medida que las WealthTechs siguen creciendo, y se avecina la entrada de las BigTech en el espacio”, añade.