MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo Aizpiri, ha considerado necesario contar con “todos los elementos de juicio” para definir la política de dividendo del grupo a partir de 2026.
El grupo ha anunciado este martes su plan estratégico 2022-2030, en el que ha confirmado su compromiso de incrementar el dividendo un 1% anual en 2022 y 2023 y mantener un dividendo sostenible de 1,74 euros por acción entre 2024 y 2026, año hasta el que da visibilidad para su política de retribución a los accionistas.
En una conferencia con analistas para presentar la nueva ‘hoja de ruta’, Gonzalo señaló que “hay tiempo por delante” para contar con “todos los elementos de juicio” en lo que se refiere a madurez de la cartera de proyectos, el nuevo marco retributivo regulatorio o las circunstancias financieras a partir de 2026, por lo que “adelantar la política de dividendo no tendría ningún sentido”.
No obstante, el directivo subrayó que para Enagás es “clave” y “esencial” cumplir con los compromisos adquiridos ante el mercado y los accionistas, como hará manteniendo la senda de dividendo marcada hasta 2026.
De cara al próximo periodo regulatorio, Gonzalo señaló que “habrá importantes novedades” con la incorporación de la retribución de todo el marco asociado a los gases renovables o el hidrógeno, “incorporando la rentabilidad a las inversiones suficiente para financiar el ‘capex’ que sea necesario para acometerlas”. “No va a ser algo imposible de casar el ‘capex’ con el dividendo”, dijo.
LAUDO POR GSP PARA EL PRIMER SEMESTRE DE 2023.
En cuanto al conflicto abierto por el Gasoducto Sur Peruano (GSP), el proyecto de gasoducto de más de 1.000 kilómetros que fue paralizado en 2017, el consejero delegado de Enagás estimó que el laudo podría producirse en el primer semestre de 2023, y con la consideración de que será “favorable” y manteniendo el derecho de cobro del 100%.
“Tenemos un caso muy robusto desde el punto de vista legal”, consideró Gonzalo, quien no obstante indicó que a efectos de caja se considera que se cobrará el 50% en 2024 -unos 200 millones de euros- y el 50% restante con posterioridad al año 2026.
Por otra parte, el consejero delegado de Enagás indicó que el grupo no prevé el ingreso de dividendos procedentes de Tallgrass Energy hasta el ejercicio 2026, ya que la prioridad para la participada estadounidense es utilizar la generación de caja en los nuevos proyectos de inversión para financiar su plan de crecimiento. En este sentido, Enagás ha estimado un ‘impairment’ por Tallgrass Energy de unos 130-140 millones de euros.