MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El gigante del comercio electrónico Amazon, así como firmas financieras como Wells Fargo o BlackRock, comienzan a replantearse sus planes para el regreso a las oficinas de los trabajadores ante el repunte de los contagios de Covid-19 provocados por la variante Delta del virus.
Según informa la cadena británica ‘BBC’, Amazon ha comunicado a su personal que no deberá reincorporarse a las oficinas de la compañía hasta el 3 de enero de 2022, revocando así la orden inicial que fijaba la vuelta para el próximo mes de septiembre.
“Continuamos observando de cerca las condiciones locales relacionadas con la Covid-19 y estamos ajustando nuestra guía para los empleados corporativos”, indicó la multinacional en referencia a los trabajadores de sus oficinas.
De su lado, BlackRock, la mayor gestora de fondos del mundo, así como el banco Wells Fargo, han informado a sus respectivas plantillas de que pospondrán los planes iniciales para el retorno a las oficinas ante la propagación del virus en Estados Unidos.
“Estamos siguiendo la variante de Delta en diferentes partes del país y monitoreando de cerca las últimas pautas de los funcionarios de salud pública y las autoridades gubernamentales locales que alientan a las personas a usar mascarillas en espacios públicos interiores de áreas de transmisión sustancial”, dijo el director de operaciones de BlackRock. , Rob Goldstein y en un memorando a los empleados, recogido por ‘The New York Times’.
De esta manera, BlackRock solo permitirá regresar a las oficinas a los empleados vacunados, que podrán regresar a partir del próximo 1 de octubre, en lugar de la fecha original del 8 de septiembre.
Asimismo, una vez que los empleados de BlackRock puedan retornar de manera masiva a las oficinas, la gestora tiene previsto implantar un modelo híbrido de trabajo por el que los empleados podrán teletrabajar hasta dos días a la semana.
En el caso de Wells Fargo, el diario neoyorquino indica que los empleados que continúan trabajando desde casa serán llamados a las oficinas a partir del próximo 4 de octubre, en lugar del 7 de septiembre, según un memorando de la entidad.
“Continuaremos observando la situación y haremos más ajustes si es necesario para priorizar la salud y seguridad de nuestros empleados y clientes”, escribió el director de operaciones de Wells Fargo, Scott Powell, en el comunicado a la plantilla.
En este sentido, la entidad dijo hace semanas que permitiría más flexibilidad para que los empleados trabajen en la oficina y de forma remota, en contraste con otros gigantes bancarios que han apostado por un retorno masivo y más temprano del personal.