MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El Tesoro Público ha colocado este jueves 4.950 millones de euros en una subasta de bonos y obligaciones del Estado, en el rango medio previsto, y lo ha hecho remunerando a los inversores con intereses más elevados por los bonos del Estado a 3 años, según los datos publicados por el Banco de España.
Los inversores siguen mostrando interés por los títulos de deuda españoles, ya que la demanda conjunta de todas las referencias (9.431 millones de euros) casi ha llegado a duplicar lo finalmente adjudicado en los mercados.
El Tesoro ha subastado en esta última subasta de junio bonos del Estado a 3 años, con cupón del 2,80%; obligaciones del Estado con una vida residual de 5 años 4 meses, con cupón del 5,15% y obligaciones del Estado a 15 años, con cupón del 3,90%.
En lo que respecta a los bonos del Estado a 3 años, el organismo ha colocado 2.032,31 millones y ha logrado una demanda de 4.022,36 millones, mientras que el interés marginal se ha situado en el 3,260%, superior al 3,058% previo.
En las obligaciones del Estado con una vida residual de 5 años 4 meses, el Tesoro ha captado 1.337,55 millones, frente a una demanda de 2.517,60 millones, y la rentabilidad se ha colocado en el 3,197%, más bajo respecto al 3,307% anterior.
Por último, el Tesoro ha colocado 1.581,11 millones de euros en obligaciones del Estado a 15 años, por encima de los 2.891,41 millones solicitados, con un interés marginal del 3,847%, inferior al 3,902% de la puja previa.
Este mismo jueves se prevé que el BCE suba los tipos de interés un cuarto de punto, hasta situar la tasa de refinanciación en el 4% y la de depósito en el 3,50%. Ayer, sin embargo, la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) decidió mantener por unanimidad los tipos de interés en el rango objetivo de entre el 5% y el 5,25% tras las diez subidas acometidas desde marzo de 2022.
EL INTERÉS POR LETRAS A 9 MESES ROZAN EL 3,5%
Esta semana, el Tesoro ya colocó 2.069,96 millones de euros en una subasta de letras a tres y nueve meses, en el rango medio previsto, y lo ha hizo remunerando a los inversores con intereses más elevados y rozando el 3,5% en el caso de la referencia a nueve meses.
El mantenimiento de los elevados intereses ofrecidos, en línea con las últimas subidas de los tipos de interés por parte del BCE, ha mantenido el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles, especialmente por la deuda a corto plazo.
La emisión se produce así en un momento en el que los inversores particulares están mostrando gran interés por la compra de deuda, principalmente a corto plazo, dada su alta rentabilidad, que ha ido creciendo desde inicios de 2022.
UN MES MARCADO POR LA EMISIÓN DE UN BONO SINDICADO
Además, las subastas de este mes han estado marcadas por el lanzamiento de un nuevo bono sindicado a 10 años con vencimiento el 31 de octubre de 2033. El Tesoro emitió 13.000 millones en la subasta y recibió una demanda por encima de 85.133 millones de euros, una de las más altas registradas por el organismo en su historia.
El bono emitido el pasado miércoles vence el 31 de octubre de 2033 y tiene un cupón del 3,55%. La rentabilidad se ha situado en 3,556%, equivalente a 10 puntos básicos por encima de la actual referencia a 10 años, con vencimiento más corto en abril de 2033.
El Departamento que dirige Nadia Calviño ha puesto en valor que esta emisión refleja la “confianza” de los inversores en el desarrollo y evolución de la economía española, que también se muestra en la “positiva evolución” de la prima de riesgo española, que ha bajado en lo últimos días y se sitúa por debajo de los 100 puntos básicos.
OBJETIVOS DEL TESORO PARA 2023
En total emisión bruta por parte del Tesoro Público será este año de 256.930 millones de euros, lo que supone un aumento del 8,2% respecto a lo estimado para 2022, debido al alza de los tipos de interés.
Por su parte, el endeudamiento neto del Tesoro Público en 2023 se mantendrá en 70.000 millones. Desglosando por tipo de instrumento, se prevé que las Letras del Tesoro aporten financiación neta negativa por 5.000 millones, por lo que los bonos y obligaciones del Estado, junto con el resto de las deudas en euros y en divisas, aportarán los 75.000 millones restantes.