Iberia recurrirá la sentencia ante la Audiencia nacional en los próximos dos meses
MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TARC) ha inadmitido, por “carecer de competencia” para ello, el recurso interpuesto por la aerolínea Iberia contra la adjudicación de varios lotes del concurso de handling de rampa del gestor aeroportuario Aena sobre los que presentó reclamación al no estar de acuerdo con la adjudicación, según la resolución dada a conocer este viernes a la que ha tenido acceso Europa Press.
Iberia podrá volver a recurrir la resolución de contrato ante la Audiencia Nacional en los próximos dos meses.
El TARC no entra a valorar el fondo del asunto ni las irregularidades que denuncia Iberia en su recurso, pero rechaza la argumentación de la aerolínea de que el concurso del handling sea asimilable a un contrato público de servicios o a una concesión de servicios.
Se trata, según el TARC, de “una relación jurídica de naturaleza especial regida por su normativa específica”, por lo que este órgano administrativo dependiente del Ministerio de Hacienda asegura que “carece de competencia para resolver sobre la reclamación planteada, lo que conduce a un pronunciamiento de inadmisión del recurso”.
IBERIA IMPUGNÓ LAS “IRREGULARIDADES”
Iberia presentó la impugnación del concurso el pasado 20 de octubre, casi un mes después de su resolución, tras perder la licencia de ocho de sus principales aeropuertos y al considerar que existían “irregularidades” en la adjudicación.
La aerolínea, hasta ahora líder en servicios de handling en España, fundamentaba su reclamación en que, a su juicio, se había vulnerado “el procedimiento legal de tramitación del expediente”, lo que había provocado su “indefensión”. En su opinión, la resolución de Aena no había sido suficientemente argumentada acogiéndose a la confidencialidad, por lo que se negaba a Iberia “el acceso a información suficiente para conocer la motivación de las puntuaciones”.
Desde el punto de vista de la aerolínea española del grupo IAG, la “escasa” información a la que había tenido acceso Iberia revelaba “irregularidades evidentes que tienen impacto en las puntuaciones”. Además, argumentaba que no se han analizado cuestiones esenciales como “la coherencia entre el plan de negocio y la oferta técnica”.
A comienzos de noviembre, el TARC admitió la suspensión cautelar de la adjudicación hasta resolver sobre el fondo del asunto. Apenas un mes después, la resolución definitiva ha llegado, y tras ella el gestor aeroporturio podría firmar los contratos con los distintos adjudicatarios.
El recurso de Iberia contiene fuertes críticas contra el procedimiento llevado a cabo por Aena, a la que acusa de falsear la adjudicación con un “informe técnico que no es propiamente tal” y que se limitó a una presentación de PowerPoint de 188 slides “que no recoge ningún tipo de motivación sobre la aplicación de los criterios sujetos a juicio de valor, ni de los criterios de eliminación directa (algunos de los cuales también requerían juicio de valor)”.
“Es un nuevo intento burdo de, a través de la mera acumulación de papel, pretender generar la apariencia de una voluminosa expresión de razones de la adjudicación cuando sobre eso no hay nada”, advertía Iberia.
Según consta en la resolución del TARC, una vez agotada la vía administrativa, Iberia deberá llevar ahora su demanda ante instancias judiciales, interponiendo un recurso contencioso-administrativo ante la Sala de lo Contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional, en el plazo de dos meses desde la recepción de la notificación que se ha producido este 1 de diciembre, según avanza el diario ‘El País’.
Desde la aerolínea han confirmado a Europa Press que procederán al recurso ante la alta instancia judicial, un proceso que puede tardar años en resolverse. En estos momentos, los abogados de la aerolínea se encuentran reunidos para decidir los siguientes pasos a tomar.
DURO GOLPE PARA IBERIA.
El resultado inicial del concurso, que se anunció en septiembre, supuso un duro golpe para el negocio de Iberia que perdiótodos los grandes aeródromos donde estaba presente por tráfico de pasajeros, excepto el de Madrid-Barajas. Iberia Airport Services cedía los aeropuertos de Barcelona-El Prat, Palma de Mallorca, Málaga, Alicante, Gran Canaria, Tenerife Sur, Ibiza y Bilbao, aunque ganó otros de tamaño pequeño y mediano como Zaragoza, Valladolid, Burgos, Huesca, Logroño, Salamanca, Almería y Murcia.
Cuando se anunció el resultado, Iberia mostró su rechazo y “perplejidad”, y aseguraba que pediría una revisión de las puntuaciones y que tomaría las “acciones oportunas”. “La cualificación y la competitividad demostradas por Iberia Airport Services que, durante los últimos siete años, ha realizado una profunda transformación y ha seguido incorporando nuevos clientes a su cartera de forma significativa con un alto grado de satisfacción, no se ha visto reflejado en el resultado de este concurso”, expresa la compañía que dirige Fernando Candela.
El concurso, que permitirá la explotación del servicio por un periodo de siete años, tiene un valor de más de 5.000 millones de euros en ingresos, ha sido adjudicado a 15 de los de 17 grandes grupos, tanto nacionales como internacionales, que presentaron 168 ofertas.
Los grupos más beneficiados por la adjudicación son Groundfource, propiedad de Globalia (matriz de Air Europa), que ha obtenido 12 licencias para 12 aeropuertos, manteniendo los de mayor tráfico (Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Málaga, Alicante, Gran Canaria, Valencia, Ibiza, Lanzarote, Zaragoza, Fuerteventura y Bilbao); la belga Aviapartner, que logra 13 licencias en 15 aeropuertos y se estrena en Madrid, Barcelona y Alicante; y la británica Menzies, con siete licencias en siete aeropuertos.
Las nuevas licencias entrarán en vigor durante los primeros meses de 2024, antes de la temporada de verano. En Canarias empezarán meses más tarde, ya que la temporada alta en las islas es la de invierno.