MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El sector pesquero europeo ha expresado su frustración tras la reunión mantenida este jueves con el comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, sobre la postura de la Comisión Europea en torno al Reglamento de Ejecución (UE) 2022/1614, que entró en vigor el pasado 9 de octubre y por el cual se han cerrado 87 zonas a la pesca de fondo en el Atlántico Nordeste.
“Los problemas siguen encima de la mesa”, ha valorado el sector tras la reunión, en la que Sinkevicius ha expresado su intención de “estudiar los errores que se hayan podido cometer ahora para no volver a repetirlos y mejorar el proceso legislativo de cara al futuro”.
El sector pesquero comunitario ha estado representado por Iván López Van der Veen, presidente de la Alianza Europea de Pesca de Fondo (EBFA por sus siglas en inglés), de la que forma parte la Confederación Española de Pesca (Cepesca).
También han estado presentes el presidente de Europêche y secretario general de Cepesca, Javier Garat; el presidente de la Asociación Europea de Organizaciones Productoras Pesqueras (EAPO), Esben Sverdrup-Jense; y representantes del sector pesquero de Dinamarca, Francia, Holanda, Irlanda y Polonia.
Durante la reunión, en la que ambas partes han mantenido sus posturas, los pescadores han expresado su desacuerdo con aspectos tanto técnicos como de procedimiento y legislativos del Reglamento de Ejecución, argumentos también esgrimidos ante la CE por parte del Gobierno de España, a través del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas; como por los consejeros del ramo de las diferentes CCAA afectadas.
Igualmente, durante el encuentro, el sector pesquero ha expuesto a Sinkevicius la posibilidad de explorar posibles soluciones al conflicto, tales como solicitar la suspensión de la norma, aunque la postura de la Comisión ha sido no admitir ninguna medida que resuelva la situación actual antes de la revisión del análisis científico.
La reunión del sector pesquero comunitario afectado por las vedas se produce 10 días después de la entrada en vigor del Reglamento de Ejecución (UE) 2022/1614 de la Comisión Europea (CE), que ha cerrado 87 zonas a la pesca de fondo en el Atlántico Nordeste, desde las costas de Irlanda hasta el Golfo de Cádiz, afectando la actividad de más de 10.000 pescadores del conjunto del sector pesquero comunitario.
Según el sector pesquero, el cierre afecta a 16.419 kilómetros entre los 400 y los 800 metros de profundidad en aguas de Irlanda, Francia, Portugal y España, donde se supone la existencia de ecosistemas marinos vulnerables (EMV).
Cepesca ha explicado que en el caso de España, el cierre afecta a alrededor de 500 buques directa e indirectamente y unos 2.500 pescadores de distintas modalidades de pesca de fondo, incluyendo las flotas de arrastre del Golfo de Cádiz y de NEAFC (Gran Sol), donde se ven “especialmente perjudicados” los barcos de palangre de fondo (pincho) de los puertos de Celeiro, Burela y Vigo, a pesar del escaso impacto de este arte en el fondo marino. En el Cantábrico Noroeste, las vedas perjudican igualmente al arrastre, el palangre de fondo, la volanta, el rasco y las artes menores.