MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Las empresas dedicadas a la industria de adhesivos y selladores facturarán al cierre de 2021 un 8% más que en 2020, alcanzando los 625 millones de euros de facturación, según las previsiones elaboradas desde el Observatorio Sectorial DBK de Informa (filial de Cesce).
Este buen dato supone un impulso tras el aciago año 2020 sufrido por el sector, en el que apenas se alcanzaron los 580 millones de facturación (una caída del -11,5% respecto a 2019). Este descenso en la actividad se explica por la caída de la actividad en los principales clientes de estas empresas, tanto en el ámbito de la construcción como en otras industrias, debido a la pandemia provocada por el Covid-19.
Por segmentos, la demanda de construcción, bricolaje y consumo generó 315 millones de euros en 2020, un 10% menos que en el ejercicio anterior. Esta cifra supuso el 54% del mercado total.
La demanda de adhesivos y selladores para la industria representó el 46% restante, tras experimentar una caída del 13% y situarse en 265 millones de euros.
Respecto a los productos, los adhesivos contabilizaron un retroceso del 12%, hasta situarse en 365 millones de euros, lo que supuso el 63% de las ventas en España. Los ingresos generados por la venta de selladores alcanzaron la cifra de 215 millones de euros, tras caer un 10,4% en 2020.
Además, en paralelo a la contracción de la demanda, el comercio exterior reflejó también un descenso, con una caída del 15% en el caso de las importaciones y del 2% en el caso de las exportaciones.
CINCO EMPRESAS COPAN EL 40% DEL MERCADO
Por otra parte, desde DBK han señalado que en 2020 existían alrededor de un centenar de empresas dedicadas a la fabricación e importación de adhesivos y selladores, las cuales daban empleo algo más de 2.000 trabajadores. “La mayor parte de las empresas son de pequeña dimensión, si bien coexisten con un número reducido de grandes operadores que concentran gran parte del mercado”, han apuntado desde la entidad.
Los cinco primeros competidores reunieron una cuota conjunta sobre el valor del mercado superior al 40%, mientras que la participación de los diez primeros se situó próxima al 60% del total.