El recibo medio de electricidad para un consumidor en la tarifa regulada se ha abaratado un 5,3% en enero con respecto al pasado mes de diciembre, en que alcanzó su precio más alto de la historia, aunque ha sido un 63,8% más caro que en el mismo mes del año pasado.
En concreto, la factura media para un consumidor doméstico ascendió a 122,13 euros en este mes de enero, lo que representa casi 6,5 euros menos que los 128,61 euros del último mes de 2021, según datos recogidos por Europa Press a partir del simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
No obstante, es casi 47,6 euros más caro que los 74,56 euros a que ascendió el recibo de enero del año pasado, un mes que registró precios entonces máximos en el ‘pool’ en su primera quincena debido a la borrasca Filomena.
Este recibo de la luz corresponde a un consumidor medio con una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW) –la misma en horario punta y valle- y una demanda anual de 3.900 kilovatios hora (kWh)–que consume el 45% de la electricidad en el horario valle, el 29% en el horario punta y el 26% en el horario llano-, propia de una familia con dos hijos.
Esta caída en el recibo de la luz con respecto a diciembre se debe, principalmente, a la ligera disminución en el precio de la electricidad en el mercado mayorista. Diciembre, con una media de 239,1 euros por MWh fue el mes más caro de la historia, después de superar los 300 euros/MWh de media –con un récord de 383,67 euros/MWh el pasado 23 de diciembre– durante varias jornadas.
2021, EL AÑO CON LA LUZ MÁS CARA
La luz cerró 2021 como el año más caro de la serie histórica, con un precio medio de 111,93 euros/MWh, debido a la espiral alcista registrada en el ‘pool’ en el segundo semestre.
Los precios del ‘pool’ repercuten directamente en la tarifa regulada –el denominado PVPC–, a la que están acogidos casi 11 millones de consumidores en el país, y sirven de referencia para los otros 17 millones que tienen contratado su suministro en el mercado libre.
MEDIDAS DEL GOBIERNO
Estos niveles en el recibo de la luz se producen a pesar de que Gobierno amplió a finales del año pasado, hasta el 30 de abril, la rebaja de los impuestos incluidos en la factura de la luz que pagan todos los consumidores con el fin de paliar el efecto negativo que la subida del precio de la electricidad está causando en los ciudadanos.
En concreto, se prorrogaron hasta el 30 de abril las rebajas del 21% al 10% del IVA y del impuesto especial eléctrico del 5,11% al 0,5%, mínimo legal. No obstante, la suspensión del impuesto de generación al 7% que pagan las empresas solo se mantendrá, por ahora, hasta el 31 de marzo.