MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
Los líderes del G7, reunidos en Alemania, han acordado la implementación de medidas inmediatas para asegurar el suministro de energía y reducir la volatilidad de costes, incluso mediante el estudio de la fijación de límites a los precios, para reducir en lo posible esta fuente de ingresos de Rusia para financiar la invasión de Ucrania.
El comunicado final de la reunión, a la que además de los representantes de las economías más desarrolladas del mundo también asistieron representantes de Argentina, India, Indonesia, Senegal, Sudáfrica y Ucrania subraya la disposición del G7 para ayudar a estabilizar y transformar la economía mundial al mismo tiempo que se hace frente al aumento del coste de vida para los ciudadanos.
En este sentido, la declaración final recoge un compromiso para la coordinación de la seguridad económica, el refuerzo de la resiliencia de las cadenas de suministro y asegurar la igualdad de condiciones.
“Tomaremos medidas inmediatas para asegurar el suministro de energía y reducir los aumentos repentinos de precios provocados por condiciones extraordinarias del mercado, incluso mediante la exploración de medidas adicionales, como límites de precios”, señala el comunicado.
En el caso concreto del petróleo ruso, los líderes del G7 han puesto sobre la mesa distintos enfoques, incluida la opción de “una posible prohibición total” de todos los servicios que permitan el transporte de petróleo crudo ruso y productos derivados por vía marítima a nivel mundial, a menos que el petróleo se compre a un precio acordado o por debajo de él.
En este sentido, se considerarán mecanismos de mitigación junto con las restricciones para garantizar que los países más vulnerables conserven el acceso a los mercados energéticos, incluso desde Rusia.
En este sentido, los líderes del G7 reafirman su compromiso de eliminar gradualmente la dependencia de sus países de la energía rusa, sin comprometer los objetivos climáticos y ambientales.
“Estamos trabajando para asegurarnos de que Rusia no aproveche su posición como productor de energía para beneficiarse de su agresión a expensas de los países vulnerables”, señalan los líderes.
En coordinación con la Agencia Internacional de la Energía (AIE), el G7 afirma su determinación para explorar medidas adicionales para reducir la volatilidad de precios y su impacto sobre la economía, incluyendo la prestación de apoyo fiscal a corto plazo a los grupos más vulnerables, así como asistencia a los países en desarrollo.
Asimismo, las economías más desarrolladas han acordado intensificar sus esfuerzos en apoyo de la estabilidad del mercado mundial de la energía, a través del aumento a corto plazo de su producción colectiva, el uso apropiado de las reservas y la colaboración con socios internacionales, para lo que han instado a los países productores a aumentar su oferta para disminuir la tensión en los mercados.
OTRAS MEDIDAS.
Por otro lado, acuerdan el objetivo de movilizar 600.000 millones de dólares (567.000 millones de euros) durante los próximos cinco años a través de la Asociación para la Infraestructura y la Inversión Global con el fin de reducir la brecha de inversión global.
De este modo, el G7 espera intensificar su cooperación a nivel mundial, incluso a través del trabajo hacia nuevas Asociaciones de Transición Energética Justa con Indonesia, India, Senegal y Vietnam, así como sobre la base de su asociación existente con Sudáfrica.
“En un momento en que el mundo se ve amenazado por divisiones y conmociones, nosotros, el G7, nos mantenemos unidos”, afirma la declaración, en la que los líderes reiteran su condena de la agresión ilegal e injustificable de Rusia contra Ucrania.
“Apoyaremos a Ucrania durante el tiempo que sea necesario, brindando el apoyo financiero, humanitario, militar y diplomático necesario en su valiente defensa de su soberanía e integridad territorial”, aseguran.
A este respecto, recuerdan que el apoyo financiero brindado en 2022 a Ucrania asciende a más de 2.800 millones de dólares (2.647 millones de euros) en ayuda humanitaria, con el compromiso de otorgar 29.500 millones de dólares (27.889 millones de euros) en ayuda presupuestaria.
“Estamos firmemente comprometidos a apoyar la reconstrucción de Ucrania a través de una conferencia y un plan de reconstrucción internacional, elaborado e implementado por Ucrania en estrecha coordinación con sus socios internacionales”, subrayan.
Asimismo, han ratificado su voluntad de continuar imponiendo costes severos y duraderos a Rusia con el objetivo de ayudar a poner fin a la guerra, que, más allá de sus implicaciones directas, está impidiendo el desarrollo global y empeorando drásticamente la seguridad energética y el acceso a los alimentos a nivel mundial.
“Nos mantenemos firmes en nuestro compromiso con nuestra coordinación sin precedentes sobre sanciones durante el tiempo que sea necesario, actuando al unísono en cada etapa”, añaden, tras acordar al comienzo de la cumbre introducir restricciones al oro ruso.
Por otro lado, los líderes del G7 han expresado su respaldo al establecimiento para finales de 2022 de un Club Climático internacional abierto y cooperativo, con la intención de impulsar acciones urgentes, ambiciosas e inclusivas para acelerar la implementación del Acuerdo de París.