MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
El 53% de las entidades financieras afirma que ha sufrido más intentos y casos de fraude en España en 2021 frente al 2020, según la encuesta que recoge el ‘Informe sobre el estado del fraude en España 2021-2022’, realizado por la Asociación Española de Empresas Contra el Fraude (AEECF).
Esta cifra supone un incremento en la percepción del fraude del 15% respecto a la cifra registrada en 2020, cuando un 47% de los encuestados afirmaba haber sufrido un intento de fraude.
Además, un 40% de los encuestados declara pérdidas por fraude mayores que el año anterior. Al respecto, el informe señala que el 33% afirma haber registrado pérdidas de más de un millón de euros, el 27% presenta pérdidas de hasta 300.000 euros, y el 40%, de entre 100.000 y 300.000 euros.
Por otro lado, la asociación indica que las entidades financieras son conscientes de la importancia de la prevención y seguimiento del riesgo y que progresivamente se están formando equipos dedicados a esta actividad, pese a que los recursos todavía son limitados. Destaca la creación de equipos exclusivamente ‘antifraude’, dejando atrás al departamento de riesgos, el de operaciones o el financiero.
“Las empresas, cada año, están más concienciadas de la lucha contra el fraude, de la protección y de la importancia crítica de la colaboración entre entidades de crédito”, comenta el director técnico de la AEECF, César Gilmartín.
Casi el 50% de los encuestados indica que los equipos destinados al análisis y seguimiento de fraudes no superan, en la mayoría de los casos, las cinco personas, mientras que solo el 13% afirma contar con equipos de más de 20 personas, en particular, en la gran banca y empresas de telecomunicaciones.
Por otro lado, para los expertos en fraude es difícil definir un perfil del defraudador. Al respecto, un 73% declara que el fraude afecta a cualquier edad y un 33% afirma que ocurre en toda situación laboral. El informe señala que se defrauda en toda España, aunque un 40% de los encuestados señala Cataluña como principal foco del fraude, seguida de Madrid, Valencia y Andalucía.
HERRAMIENTAS PARA COMBATIR EL FRAUDE
Ante este panorama, la AEECF apunta a las soluciones tecnológicas como las protagonistas en la prevención del fraude, cada vez más tecnológico y con una ingeniería social más elaborada detrás. Sin embargo, el estudio recoge que las herramientas preferidas por los expertos en fraude no son las que emplean en el día a día.
La iniciativa más usada por las empresas financieras (100%) es la consulta de bases de datos internas; seguida de la validación de documento identificativo (86%); las bases de datos externas (80%); el análisis o verificación del dispositivo (73%); las bases de datos de fraude compartido (53%) y, por último, la verificación de identidad o prueba de vida son tan solo utilizadas en un 47%.
En cambio, las herramientas que más valoras los analistas de fraude son las relacionadas con los canales digitales y que todavía no tienen tanta implantación en las entidades digitales como las relacionadas con la biometría física y comportamental (con una puntuación de 8,6 sobre 10), con el análisis del dispositivo (8,2 sobre 10), pruebas de vida y bases internas (8,1 sobre 10) y bases compartidas (8 sobre 10).
Sobre las dificultades en el día a día de la lucha contra el fraude, un 40% de los encuestados destaca que el principal problema de las herramientas es la falta de automatización, lo que supone la revisión constante de un gestor. Un 20% señala como dificultad los falsos positivos, mientras que un 13% subraya la falta de compartición de datos (soluciones locales o aisladas) como su principal problema.