MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
ABP, el fondo de pensiones de los empleados del Gobierno de Países Bajos y del sector educativo, ha decidido dejar de invertir en empresas productoras de combustibles fósiles (petróleo, gas y carbón), citando un informe reciente del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas que indica que ya hay gente en el mundo notando los “efectos físicos” del cambio del clima.
Debido a esta nueva política, el fondo de pensiones también tiene previsto desinvertir por completo en el sector fósil de forma escalonada. El objetivo es vender 15.000 millones de euros en activos, representativos del 3% del total de activos en cartera de ABP.
“Queremos contribuir a minimizar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius. (…) Rompemos con nuestras inversiones en productos de combustibles fósiles porque vemos oportunidades insuficientes como accionistas para empujar a favor de una aceleración significativa y necesaria de la transición energética”, ha indicado la presidenta del consejo de ABP, Corien Wormann.
El fondo realizará de manera gradual estas desinversiones, aunque estima deshacerse de la mayor parte de su cartera fósil para el primer trimestre de 2023. La firma asegura que esta decisión no tendrá ningún impacto negativo en los retornos “a largo plazo” del fondo.