Mantiene sus previsiones macroeconómicas para España, con un crecimiento del 5,8% en 2022 y del 3,8% en 2023
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha expresado su satisfacción con la reforma del mercado laboral recientemente aprobada en España, de la que destaca su elevado grado de respaldo derivado del diálogo con los agentes sociales, mientras que insta al Gobierno a presentar un plan de consolidación fiscal “creíble” a mediano plazo.
En las conclusiones de las consultas con España del ‘Artículo IV’ de 2021, el directorio del FMI mantiene sin cambios las últimas previsiones macroeconómicas para el país, que se publicaron a finales de enero, con un crecimiento del PIB en 2022 del 5,8%, que se moderará al 3,8% el próximo año y al 2,3% en 2024.
En este sentido, reitera su confianza en que la variante ómicron tenga solo un impacto moderado en la actividad económica, mientras que la recuperación de la economía española se verá respaldada por un robusto consumo privado, el impulso de la inversión pública financiada en parte por los fondos europeos y una normalización gradual de los flujos de turismo internacional.
Asimismo, el organismo ve probable que la inflación en España se mantenga elevada a principios de 2022 debido a los altos precios de la energía y las interrupciones en la cadena de suministro, pero confía en que se modere en la segunda mitad del año a medida que estos factores se disipen.
De hecho, las previsiones del FMI apuntan a que la tasa media de inflación, que en 2021 alcanzó el 3,1%, suba este año al 3,5%, para bajar al 1,2% de media en 2023 y al 1,6% un año después.
En cuanto a la evolución del mercado laboral, el directorio el FMI celebra que el empleo se haya recuperado con fuerza y ya supere los niveles anteriores a la crisis. Así, las proyecciones del Fondo apuntan a que la tasa de paro bajará este año al 14% desde el 15% del cierre de 2021, para seguir disminuyendo los próximos años hasta situarse en el 13% en 2026.
Por otro lado, el FMI espera que España logre reducir este año su déficit presupuestario al 5,3% del PIB desde el 7,8% del año pasado, mientras que el desequilibrio negativo se reduciría al 4,3% el año próximo, pero no bajaría del 4% en todo el horizonte de las previsiones, que alcanzan hasta 2027.
“El panorama es altamente incierto y dependerá de la evolución de la pandemia y la persistencia de cuellos de botella en el suministro global”, advierte el FMI, subrayando que el ritmo de absorción y la eficacia del uso de los fondos europeos también afectarán el crecimiento de España en los próximos años.
URGE A PLANTEAR UN PLAN DE CONSOLIDACIÓN FISCAL.
Asimismo, el directorio del FMI ha expresado su satisfacción con la reforma laboral recientemente aprobada en España, de la que destaca el elevado consenso alcanzado a través del diálogo con los agentes sociales, además de aplaudir que busque abordar las deficiencias del mercado, haciendo más atractivos los contratos indefinidos, así como equilibrar una mayor protección para los trabajadores y la flexibilidad para las empresas.
“Los directores acogieron con beneplácito la reforma laboral aprobada recientemente”, recoge el documento del Fondo, donde se hace hincapié en la importancia de fortalecer la educación y las políticas activas del mercado laboral para facilitar la mejora de las habilidades de la fuerza laboral y la reasignación sectorial, subrayando la importancia de la coordinación para garantizar la eficacia.
En su análisis, advierten de que, si bien la recuperación está en curso y el empleo se ha recuperado con fuerza, la actividad se mantiene por debajo de los niveles previos a la pandemia y las perspectivas se ven empañadas por una elevada incertidumbre.
En este sentido, el directorio del FMI considera que el apoyo a la economía debe seguir siendo flexible hasta que la recuperación esté ampliamente afianzada, añadiendo que se necesitan políticas prudentes a mediano plazo para respaldar la estabilidad macrofinanciera y promover un crecimiento sostenible, más verde e inclusivo.
De este modo, recomienda que la política fiscal siga prestando apoyo a corto plazo, pero cada vez más enfocada hacia los vulnerables, subrayando que, a medida que se afiance la recuperación, la deuda pública debería reducirse gradualmente para reconstruir el espacio fiscal de cara a futuros ‘shocks’.
“Una formulación temprana de un plan creíble de consolidación fiscal a mediano plazo podría ayudar a generar el consenso social necesario y respaldar la confianza de los inversores”, apunta el directorio del FMI, para el que también es importante “asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones”.
Por otro lado, los directores acogieron con beneplácito los ambiciosos objetivos de mitigación climática recientemente adoptados en España, destacando el aumento gradual y predecible del precio del carbono, al tiempo que se protege a los hogares vulnerables.
Asimismo, “elogiaron la reforma estructural integral y la agenda de inversión de las autoridades”, señalando que los fondos Next Generation EU (NGEU) brindan una oportunidad excepcional para apoyar la recuperación al tiempo que promueven una transición hacia una economía más productiva, inclusiva, ecológica y digital.
A este respecto, destacaron la importancia de establecer un marco para garantizar un uso transparente y eficiente de los fondos de inversión.