El organismo sugiere al Gobierno peruano que trabaje para recuperar la estabilidad y evitar un debilitamiento mayor de la situación macroeconómica
MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha señalado que la incertidumbre política, la desaceleración económica internacional y el endurecimietno de las condiciones financieras tendrán un impacto “negativo” en el crecimiento de la economía peruana, provocando que la recuperación sea “lenta” en el corto plazo.
Estas son algunas de las conclusiones preliminares que ha extraído el personal técnico del FMI tras su visita a Perú para la elaboración del ‘Artículo IV’, el cual ha sugerido al Gobierno que se debe trabajar “en todo el espectro político” para restaurar la confianza, preservar la estabilidad y acelerar las reformas estructurales con el objetivo de dar impulso a la actividad económica y reducir la desigualdad y la pobreza en el país.
En este contexto, el FMI ha manifestado que las perspectivas económicas para Perú son “muy inciertas” y prevalecen ciertos riesgos tanto externos como internos como la volatilidad de los precios, el efecto de la guerra en Ucrania o la “intensificación” del malestar social.
Estos últimos factores nacionales, según han recogido desde el Fondo, podrían “obstaculizar” la actividad económica y “poner en riesgo” la consolidación fiscal planificada a medio plazo.
INFLACIÓN, EL DESAFÍO “MÁS INMEDIATO”
Entre los principales desafíos macroeconómicos a los que se enfrenta Perú, el “más inmediato” a los ojos del FMI es la inflación. Si bien, el organismo ha valorado positivamente el enfoque “apropiado” de endurecimiento aplicado por el banco central del país, que “ayudará” a protegerse de los efectos de segunda ola que podrían causar las protestas en el proceso desinflacionario.
Así, el FMI ha estimado que la inflación se mantendrá “obstinadamente alta “en el corto plazo, pero se llegará a la meta fijada por el organismo central a finales de 2023 o principios de 2024.
Por su parte, el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) se desacelerará al 2,4% en 2023 antes de retornar a su potencial del 3% en los años siguientes. Con todo, una “aceleración” de las reformas estructurales podría aumentar el potencial de crecimiento a medio plazo de Perú. En este sentido, el organismo multilateral ha asegurado que el proceso de adhesión a la OCDE brinda la oportunidad de definir una agenda de reformas estructurales “bien articulada”.
MARCO ECONÓMICO “SÓLIDO”
A favor de la economía peruana se encuentran factores como el “sólido” desempeño del país en el último cuarto de siglo, permitiendo contar con una economía “resistente” basada en un marco macroeconómico “adecuado”.
“Perú mantiene fundamentos muy sólidos y marcos de políticas institucionales que sustentan la resiliencia de la economía ante shocks externos e internos”, ha apuntado el FMI.
Pese a ello, el Fondo ha definido como “apropiado” un pequeño impulso fiscal focalizado y temporal en el corto plazo dada la debilidad de la actividad económica. Además, este impulso tiene que ser “moderado” ya que, de lo contrario, podrían aumentar las presiones inflacionarias.
Finalmente, el FMI ha advertido sobre las consecuencias que tiene el cambio climático para la economía del país, por lo que ha instado al Gobierno peruano a asegurar el cumplimiento de las “ambiciosas” metas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y a facilitar la colaboración del sector privado en esta causa mediante la creación de un entorno regulatorio y de financiación que sean “propicios”.