Pese a que el límite logrará abaratar un 38% el precio del ‘pool’, el Gobierno estima en un 15% la rebaja para un consumidor doméstico
MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El Pleno del Congreso examinará este jueves el decreto ley aprobado por el Gobierno para limitar el precio del gas para la generación eléctrica durante un año, mecanismo avalado por la Comisión Europea ayer miércoles y que hasta ahora no había sido aplicado a la espera de esta autorización.
Y es que, aunque el decreto ley está en vigor desde su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 14 de mayo, la medida ‘estrella’ del Gobierno para frenar la escalada del precio de la luz se supeditaba a una orden ministerial a aprobar tras recibir el visto bueno de las autoridades europeas.
Tras el visto bueno de la Comisión Europea al mecanismo ibérico para limitar el precio del gas y rebajar el precio de la electricidad en la Península Ibérica, el tope se aplicará a partir de la subasta del mercado eléctrico del próximo martes 14 de junio, que fijará el precio para el día siguiente, informó el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El BOE publicará este jueves una Orden de la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que especificará la fecha de aplicación del mecanismo, que será a partir del próximo martes, 14 de junio, y afectará a la casación del mercado mayorista de la electricidad que se celebrará ese día para fijar los precios del día siguiente, miércoles 15 de junio.
De este modo, las compañías eléctricas y el resto de agentes del mercado tienen plazo suficiente para presentar las garantías económicas que respalden sus operaciones, añadió el Ministerio.
LA ‘EXCEPCIÓN IBÉRICA’ AL MERCADO MARGINALISTA
La denominada ‘excepción ibérica’, permitirá desacoplar temporalmente los precios del gas y la electricidad en la Península Ibérica, que se beneficiará así de una excepción, tal y como se acordó en el Consejo Europeo de marzo. De esta forma, se fija un precio medio de 48,75 euros por megavatio/hora (MWh) durante un periodo de doce meses, cubriendo así el próximo invierno, período en el que los precios de la energía son más caros.
Inicialmente, el precio de referencia del gas se fijará en 40 euros/MWh durante los primeros seis meses, incrementándose en 5 euros/MWh al mes a partir de entonces, terminando en 70 euros/MWh para que haya una convergencia a la normalidad, frente al actual precio de referencia en el mercado de más de 100 euros/MWh -como en el caso del TTF holandés, de referencia en Europa-.
El tope supone una excepcionalidad en el funcionamiento del mercado marginalista, ya que permitirá retribuir a precio de gas únicamente la electricidad generada en las centrales de gas, y no pagar este sobrecoste al resto de centrales de generación.
Tras aprobarlo en un Consejo de Ministros extraordinario el pasado 13 de abril, la vicepresidenta para la Transición Ecológica, estimó que la ‘luz verde’ de Bruselas llegaría en “unas dos semanas”, pero han tenido que pasar tres semanas para que se produjera.
En esa comparecencia, Ribera estimó que la medida supondrá una mejora inmediata para un 37% de los consumidores domésticos y para el 70% para los industriales, con una caída del precio del ‘pool’ de un 38% en su precio promedio, desde los 210 euros por megavatio hora (MWh) marcados a lo largo del primer trimestre de este año hasta unos 130 euros/MWh.
Concretamente, el Gobierno estima que durante los doce años de aplicación de este mecanismo el precio de casación medio será de unos 126,54 euros/MWh, pero la compensación posterior a las centrales dejará un precio medio a asumir por los consumidores de 166 euros/MWh.
EL GOBIERNO CIFRA LA REBAJA EN UN 15% PARA UN CONSUMIDOR DOMÉSTICO
Estos cálculos, expuestos por el Gobierno en la memoria de impacto que acompaña al decreto ley, a la que ha tenido acceso Europa Press, afloran una rebaja media del 15,3% para un consumidor doméstico, y entre el 18% y el 20% de rebaja para un consumidor industrial.
La aplicación del tope medio al 48,75 euros/MWh, estima el Gobierno, resultará un precio de casación marginal resultante de 126,54 euros/MWh, al que habría que sumar el coste del ajuste a pagar por los consumidores, la compensación a las centrales con los precios topados, que de media supondrá 45,17 euros/MWh, según estas estimaciones.
EL ‘POOL’ SE ABARATARÁ UN 22% DE MEDIA EN UN AÑO
La suma del precio total de casación más el ajuste resultaría un total de 171,70 euros/MWh, que al rebajar la bonificación a los consumidores por las rentas de congestión –diferencia entre la electricidad resultante del tope en la Península Ibérica y la de Francia–, que el Gobierno estima en 5,71 euros/MWh de media, acabaría dando como resultado 166 euros/MWh.
Esta cifra supondría una rebaja en el precio de la electricidad del 22% respecto a los 213 euros/MWh que estima a una cotización del gas natural a 96 euros/MWh, valor constante considerado por el Ejecutivo en sus estimaciones.
Sin embargo, al analizar el impacto de la medida sobre las facturas de los consumidores finales, el Gobierno señala que la rebaja media para un consumidor medio (2.400 kWh, 4,1 kW) acogido a PVPC, con la rebaja fiscal vigente y los actuales valores de peajes y cargos del sistema eléctrico, será del 15,3%.