Las perspectivas de estabilidad financiera siguen siendo frágiles para la eurozona
MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
El endurecimiento de las condiciones de financiación como consecuencia de las subidas de los tipos de interés para contener la elevada inflación puede poner a prueba a familias, empresas, gobiernos y segmentos del mercado como el inmobiliario, lo que podría llegar a revelar vulnerabilidades en el sector financiero, según advierte el Banco Central Europeo (BCE).
Según el informe semestral sobre la estabilidad financiera de la zona euro, el BCE concluye que las perspectivas de estabilidad financiera de la región “siguen siendo frágiles”, en el contexto de las recientes tensiones bancarias fuera de la unión monetaria.
En este sentido, la institución considera que, si bien las condiciones económicas han mejorado levemente, las perspectivas de crecimiento inciertas, junto con la inflación persistente y el endurecimiento de las condiciones financieras continúan pesando sobre los balances de empresas, hogares y gobiernos.
Además, alerta de que un deterioro inesperado en las condiciones económicas o mayores restricciones financieras podría conducir a ajustes de precios desordenados en los mercados financieros o inmobiliarios o en ambos.
“A medida que endurecemos la política monetaria para reducir la alta inflación, esto puede revelar vulnerabilidades en el sistema financiero”, ha advertido el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, en la presentación del informe, subrayando la importancia “fundamental” de controlar tales vulnerabilidades e implementar completamente “la unión bancaria para mantenerlas bajo control”.
En cualquier caso, el vicepresidente del BCE ha subrayado que la estabilidad de precios “es crucial” para una estabilidad financiera sostenible.
En el caso de los mercados financieros y los fondos de inversión, el BCE señala que estos siguen siendo vulnerables a los ajustes de precios de los activos, subrayando que las altas valoraciones, las condiciones de financiación más estrictas y la menor liquidez del mercado podrían aumentar el riesgo de que cualquier ajuste se vuelva desordenado, especialmente en caso de que se renueven los temores de recesión.
De esta manera, aunque por el momento los fondos de inversión no se han visto afectados en gran medida por las recientes tensiones bancarias de EE.UU. y Suiza, el BCE advierte de que esto podría cambiar si los fondos repentinamente requirieran liquidez, obligándolos a vender activos rápidamente.
En cuanto a los bancos de la zona del euro, el BCE considera que también han demostrado ser resistentes a las tensiones financieras recientes debido a unas exposiciones limitadas, lo que se vio respaldado por sólidas posiciones de capital y liquidez tras los esfuerzos de reguladores y supervisores en los últimos años.
“Será esencial preservar esta resiliencia en medio de algunas preocupaciones sobre la capacidad de los bancos para acumular capital”, apunta la institución en referencia al impacto de las subidas de tipos en los volúmenes de préstamos y el aumento de los costes de financiación de los bancos, lo que puede afectar su rentabilidad.
Además, apunta el banco central, ya hay señales de deterioro de la calidad de los activos en las carteras de préstamos expuestas a bienes raíces comerciales, empresas más pequeñas y préstamos al consumo, lo que podría obligar a los bancos a reservar más fondos para cubrir pérdidas y administrar sus riesgos crediticios.
CORRECCIÓN INMOBILIARIA.
En particular, el informe del BCE advierte de que los mercados inmobiliarios de la zona del euro están experimentando una corrección, incluyendo un enfriamiento considerable de las subidas de precios en el segmento residencial, reduciendo la sobrevaloración del sector.
“Si bien los ajustes de precios han sido ordenados hasta ahora, podrían volverse desordenados si las tasas hipotecarias más altas reducen cada vez más la demanda”, apunta la institución.
Asimismo, señala que el segmento inmobiliario comercial continúa en recesión, enfrentando condiciones de financiación más estrictas y una perspectiva económica incierta, así como una demanda más débil luego de la pandemia, y alerta de que corrección en curso podría poner a prueba la resistencia de los fondos de inversión con intereses en el sector inmobiliario comercial.