La entidad reconoce que probablemente será necesario subir tipos en los próximos meses
El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra ha decidido por mayoría mantener el tipo de interés de referencia para sus operaciones en el mínimo histórico del 0,1%, según ha anunciado la institución, que ha mantenido también sin cambios el volumen de sus programas de compra en 895.000 millones de libras (1,06 billones de euros), a pesar de la aceleración de la inflación y del comienzo del ‘tapering’ por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
Como en la anterior reunión del Comité, celebrada el pasado 29 de septiembre, la decisión de mantener sin cambios los tipos de interés en el 0,1% fue adoptada por una mayoría de 7 votos contra 2, ya que Dave Ramsden y Michael Saunders votaron en contra de mantener la tasa al preferir una subida de 15 puntos básicos, hasta el 0,25%.
En su análisis, el banco central británico anticipa que la inflación interanual podría subir en noviembre hasta alrededor del 4,5% y mantenerse cerca de ese nivel durante el invierno para escalar a un máximo de alrededor del 5% en abril de 2022, materialmente por encima de las anteriores previsiones de la entidad.
Sin embargo, el Banco de Inglaterra confía en que la presión al alza sobre la inflación “se disipe con el tiempo”, a medida que disminuyan las interrupciones de la oferta, se reequilibre la demanda global y los precios de la energía dejen de subir, lo que dará como resultado un sustancial retroceso de la inflación en la segunda mitad de 2022.
“Dado el desfase entre los cambios en la política monetaria y sus efectos sobre la inflación, el Comité, al juzgar la postura política adecuada, se centrará siempre en las perspectivas de inflación a mediano plazo en lugar de los factores que probablemente sean ser transitorio”, ha explicado la entidad para justificar la decisión de no cambiar su posición a pesar de empeorar sus previsiones de inflación.
No obstante, tal y como ha señalado con anterioridad, el Comité consideró que probablemente sea necesario un modesto endurecimiento de la política monetaria durante el periodo de sus previsiones para cumplir la meta de inflación del 2% de manera sostenible en el mediano plazo, admitiendo que los últimos acontecimientos, junto con las proyecciones actualizadas del Comité, refuerzan esta opinión.
De este modo, ha indicado que, siempre que los datos entrantes, particularmente sobre el mercado laboral, estén ampliamente en línea con las proyecciones centrales de la entidad, “será necesario en los próximos meses aumentar la tasa para devolver la inflación de manera sostenible a el objetivo del 2%”.