MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
La crisis económica derivada de la pandemia del Covid-19, que ha provocado un desplome histórico de la economía española del 10,8% en 2020, ha supuesto un importante incremento del gasto público en España para paliar los efectos sobre las familias y empresas, que el Banco de España cifra en un 5,5% del PIB entre 2020 y 2023, es decir, más de 61.000 millones de euros.
En concreto, la autoridad monetaria estima, de acuerdo con sus últimas proyecciones recogidas por Europa Press, que las medidas aprobadas en 2020 para combatir los efectos del Covid-19 aumentaron el gasto público en torno a 3,5 puntos del PIB, lo que supone un montante de unos 40.000 millones de euros, debido principalmente al pago de los ERTE, el cese de actividad de los autónomos o los avales del ICO.
El mayor impacto del gasto público ha tenido lugar en 2020, que será el año más golpeado por la crisis dado el cierre prácticamente total de la economía española durante tres meses, pero el Gobierno seguirá haciendo un esfuerzo extra este año, toda vez que ha prolongando hasta mayo tanto los ERTE, como las ayudas a autónomos y las medidas de liquidez, y no descarta hacerlo hasta finales de año.
De esta forma, el Banco de España prevé que el gasto público para combatir la pandemia en 2021 será del 1,4% del PIB, unos 16.000 millones de euros, aunque en esta estimación no está recogido el último plan del Gobierno, aprobado hace apenas dos semanas, que destina a ayudas directas 7.000 millones y que tendrá un impacto tanto en el gasto como en el déficit.
El organismo liderado por Pablo Hernández de Cos contempla también que para 2022 y 2023 el gasto adicional para combatir la pandemia será todavía de 0,3 puntos del PIB cada año, es decir, unos 6.600 millones de euros en los dos ejercicios, en línea con su pronóstico de que España no superará definitivamente la crisis hasta mediados de 2023.
DÉFICIT PÚBLICO CERCANO AL 11%
Como consecuencia de este incremento del gasto, a lo que se une la caída de los ingresos fiscales por la desaceleración de la actividad, el Banco de España contempla que el déficit público cierre 2020 en el 10,5% del PIB, más de 11.000 millones de desfase, cifra históricamente alta y que supera los ‘números rojos’ de la anterior crisis económica.
Para los próximos años prevé un descenso paulatino del déficit y estima una reducción hasta el 7,7% del PIB este año, al 4,8% en 2022 y al 4,4% en 2023, con lo que al final del periodo aún se situaría en cotas “muy elevadas” y por encima de los niveles prepandemia, y todavía no cumpliría las reglas comunitarias de una tasa por debajo del 3% del PIB, actualmente en suspenso por la pandemia.