MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El Banco de España ha constatado que la financiación de las empresas no financieras mediante crédito proporcionado por entidades bancarias residentes ha mostrado un “escaso dinamismo” desde el verano de 2020, especialmente debido a factores de demanda.
En un artículo analítico del organismo titulado ‘Evolución reciente del crédito a las sociedades no financieras: factores de demanda y de oferta’, el Banco de España afirma que esta evolución, tras el impacto de la crisis sanitaria, se ha producido en un contexto de debilidad de la demanda, de relativa estabilidad de la oferta de fondos bancarios y de repunte del recurso a la financiación con valores de renta fija.
El análisis de la autoridad monetaria, que recopila información granular de empresas y de bancos, confirma que esta pérdida de dinamismo de la financiación bancaria se explicaría fundamentalmente por factores de demanda.
En particular, el Banco de España encuentran indicios de que algunas empresas habrían estado utilizando una parte de los colchones de liquidez acumulados durante 2020 y de que las grandes empresas habrían sustituido una parte de su financiación con préstamos bancarios por valores de renta fija.
El análisis también sugiere que los factores de oferta vinculados con la disponibilidad de capital por parte de las entidades bancarias no han desempeñado un papel importante para explicar la debilidad del crédito concedido a las sociedades no financieras durante el período examinado.
Concretamente, apunta que tras el fuerte recurso a la financiación mediante préstamos bancarios con aval público que tuvo lugar durante la primavera de 2020 para dar respuesta a la crisis sanitaria, el crédito concedido por las entidades de crédito residentes a las sociedades no financieras ha mostrado signos de debilidad.
Desde agosto de 2020 el saldo vivo de esta fuente de financiación ha presentado una evolución descendente de forma prácticamente ininterrumpida, en términos desestacionalizados, salvo algunos repuntes puntuales, como el que tuvo lugar a finales de 2021.
Por su parte, el saldo de la financiación captada por las sociedades no financieras mediante la emisión de valores de renta fija ha aumentado a buen ritmo desde junio de 2020, llegando a alcanzar tasas intertrimestrales del 6,1% en noviembre.
El Banco de España afirma que el análisis de los flujos brutos de ambas fuentes de financiación arroja unos resultados similares. Así, mientras que los flujos de nuevas emisiones, en términos acumulados de tres meses, se situaban en diciembre de 2021 alrededor de un 60% por encima de los niveles registrados, en promedio, en 2019, los de nueva financiación bancaria continuaban situándose en niveles claramente inferiores a los de entonces.
En la misma línea, la Encuesta sobre Préstamos Bancarios refleja que, tras el extraordinario repunte de las peticiones de fondos para financiar las cuantiosas necesidades de liquidez en el segundo trimestre de 2020 como consecuencia de las restricciones introducidas durante la pandemia, la demanda de préstamos bancarios habría permanecido débil hasta el cuarto trimestre de 2021 (última información disponible), tanto en el caso de las grandes empresas como en el de las pymes.
Por el lado de la oferta, los criterios de concesión de los préstamos habrían permanecido sin cambios o mostrado ligeros endurecimientos desde el cuarto trimestre de 2020.