MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
La Junta de Gobierno del banco central de México (Banxico) ha apuntado que el panorama inflacionario sigue siendo “complejo” e “incierto”, aunque tras la última subida de los tipos de interés que tuvo lugar a finales de marzo podría poner fin al ciclo alcista en su tasa de política monetaria.
Así se desprende del acta de su última reunión, en la que se optó por un incremento de 25 puntos básicos, hasta el nivel del 11,25%. En dicho documento se recoge que todos los miembros de la Junta han reconocido que las presiones sobre la inflación se están moderando, por lo que la próxima decisión se tomará en función de como avancen los distintos factores macroeconómicos.
Entre otros, la inflación subyacente continúa siendo una preocupación para el organismo central, poniendo el foco en su “persistencia” en niveles elevados. A su vez, el balance de riesgos continúa al alza, por lo que se ha tildado como “apropiado” el último aumento de 25 puntos básicos.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de México cayó casi ocho décimas en marzo respecto al mes anterior, hasta situarse en el 6,85% interanual. Hace falta remontarse al año 2021, concretamente al mes de octubre, para encontrar una cifra interanual tan baja.
Al mismo tiempo, la subyacente también se ha reducido en marzo, aunque se mantiene por encima del índice general, en el 8,09% interanual, lo que supone algo menos de una décima con respecto a febrero.
Las expectativas de inflación del Banxico se han ajustado ligeramente y se mantiene la llegada a la meta para el cuarto trimestre del año 2024, puesto que la caída en el índice de precios serán más notoria en los próximos meses.
“En la próxima decisión se determinará si la evolución de los datos permite confirmar el nivel de 11,25% como tasa terminal o sise requerirá un ajuste adicional”, se puede leer en el acta de la reunión.
Finalmente, en lo que se refiere a la crisis del sistema bancario en Estados Unidos, el banco central de México ha coincidido en que el impacto en México es “limitado” y las entidades financieras cumplen “de manera holgada” con los requisitos de liquidez y capitalización.