El Banco Central de Chile empeora su previsión y cree que la economía chilena podría crecer un 0,25% en 2023

El organismo ha mantenido esta semana los tipos de interés en el 11,25%, ante una inflación que cerrará el año en el 7,7%

MADRID, 20 (EUROPA PRESS)

El Banco Central de Chile ha revisado ligeramente a la baja sus perspectivas para la economía chilena en el año 2023, calculando una caída del 0,5% en el escenario más negativo o una expansión del Producto Interior Bruto (PIB) del 0,25% en el más positivo, frente al crecimiento del 0,5% al que preveía que podría llegar Chile en su anterior informe de política monetaria, divulgado el pasado mes de marzo.

En el nuevo informe dado a conocer este martes, se explica este empeoramiento de las previsiones por una caída del consumo privado que está siendo mayor a lo que se anticipaba. No obstante, se espera una menor caída del consumo en el segundo trimestre.

Por el contrario, en lo que se refiere a 2024, el banco central ha mejorado sus previsiones, con un crecimiento que oscilará en torno al 1,25% y 2,25%, frente al rango de entre el 1% y 2% que preveía en marzo. Para 2025, se mantiene que la economía crecerá entre un 2% y un 3%.

En el plano internacional, la mejor partida del año en algunas economías repercute en un alza en las proyecciones para 2023. Sin embargo, las expectativas continúan siendo débiles, y para Chile el impulso externo será “acotado”.

LA INFLACIÓN LLEGARÁ AL 3% EN 2024

En el informe de política monetaria, el Banco Central de Chile considera que la inflación continuará bajando en los próximos meses, tras lograr mantenerse por debajo de los dos dígitos en los pasados meses de abril y mayo.

Así, al cierre del año, el índice de precios se situará en promedio en el 7,7%. Esta cifra es dos décimas inferior a la que calculaba la entidad en el informe publicado en marzo. A su vez, en lo que se refiere al dato de diciembre, la inflación sería del 4,2% (frente al 4,6% pronosticado anteriormente).

Mientras, la inflación subyacente al cierre del año será del 6,5%, cuatro décimas menos de lo previsto en marzo, y todavía por encima de la media de la inflación. Tanto el índice general como el subyacente convergerán al 3% durante 2024 y se mantendrán en ese valor hasta fines del horizonte de política, el segundo trimestre de 2025.

“La inflación subyacente se reducirá de manera más evidente hacia fines de 2023 e inicios de 2024, similar a lo que se había anticipado en marzo”, ha explicado el organismo.

En este contexto, el organismo central ha decidido esta misma semana congelar por quinta ocasión consecutiva los tipos de interés en el 11,25% aunque ha adelantado que se podría proceder a una reducción en el corto plazo en el caso de que se consolide la actual tendencia a la baja de la inflación.