MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El Comité de Política Monetaria del Banco Central de Brasil ha sorprendido con su última decisión de política monetaria, en la que ha abogado por subir los tipos de interés –tasa Selic– en 150 puntos básicos, hasta el 7,75%, el nivel más alto para el índice desde septiembre de 2017.
La institución central ha explicado en un comunicado este miércoles que a pesar de un mejor desempeño de las cuentas públicas brasileñas, las dudas alrededor del marco fiscal del país han incrementado los riesgos de no anclar las expectativas de inflación en el medio plazo, lo que supondría que estas se incrementen por encima del escenario base.
La inflación registró en septiembre un incremento del 1,16% con respecto al mes anterior, lo que supone la mayor variación para este mes desde 1994, mientras que en términos interanuales, el aumento de precios fue del 10,25%, frente al 9,68% observado en agosto.
El organismo ha señalado que los avances de los precios, impulsados por los componentes más volátiles, están superando las expectativas. No obstante, también hay presiones adicionales sobre productos y servicios asociados a la inflación subyacente.
“Las distintas medidas de inflación subyacente se encuentran por encima del rango compatible con el logro de la meta de inflación”, ha apostillado el comunicado del banco.
Las proyecciones de inflación del Comité apuntan a un nivel del 9,5% para 2021, un 4,1% en 2022 y un 3,1% para 2023. Este escenario asume una trayectoria de tipos de interés que se eleva al 8,75% este año, al 9,75% interanual durante 2022 y del 7% interanual en 2023.
El Comité entiende que la decisión de subir los tipos en 150 puntos refleja un escenario con un balance de riesgos más convulso de lo habitual. Asimismo, la nueva acción del organismo implica suavizar las fluctuaciones en el nivel de actividad económica y promover el pleno empleo.
“El Copom considera que, dado el deterioro en el balance de riesgos y el incremento en sus proyecciones, este ritmo de ajuste es el más adecuado para asegurar la convergencia de la inflación a las metas en el horizonte relevante”, ha explicado el organismo.
El Banco Central ha adelantado que para la próxima reunión prevé otro ajuste de la misma magnitud, con la intención de que la inflación converja hacia su meta del 3,75%, con un punto y medio de tolerancia al alza (5,25%) y a la baja (2,25%).
Por otra parte, el organismo ha destacado que el entorno del escenario exterior se ha vuelto “menos favorable” por las presiones inflacionarias, llevando a los responsables de política monetaria de diferentes países a adoptar respuestas para frenar el aumento de precios, un escenario que se torna “más desafiante” en economías emergentes.
En cuanto a la actividad económica brasileña, los indicadores publicados desde la última reunión muestran una evolución ligeramente por debajo de las expectativas.