MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
Nueve de cada diez empresas (91%) tienen prevista la instalación de paneles fotovoltaicos para favorecer el autoconsumo y apostar por el auge de las energías de fuentes renovables, según se desprende del informe ‘La gestión energética en las compañías españolas’ de KPMG.
Ante la inestabilidad de los recursos energéticos los consumidores han cambiado sus hábitos de consumo para ajustarlos a las necesidades del momento que tienen como objetivo paliar los efectos adversos.
Así, según el análisis, la mitad de las empresas sufrieron modificaciones importantes en su consumo energético entre 2019 y 2021, con reducciones entre un 10% y 30% en el peor momento de la crisis sanitaria, con fuertes repuntes un año después.
En este sentido, el 32% de los encuestados afirman que ya cuentan con instalación fotovoltaica y un 47% responde que a pesar de haber podido instalar la planta no lo han llevado a término.
De las empresas que ya cuentan con paneles, siete de cada diez empresas (73%) lo han hecho con inversión propia, y solo el 27% ha sido con financiación de terceros.
Además, un 64% de los encuestados que tienen posibilidad de instalación de autoconsumo, estarían interesados en un autoconsumo compartido.
Según KPMG, la radiografía de la situación actual muestra el interés creciente por las renovables, en especial, las plantas fotovoltaicas y mediante la aplicación de acuerdos a largo plazo se busca de manera prioritaria reducir costes.
EL COSTE ENERGETICO SUPONE HASTA EL 15% DE LA FACTURACION
Según la encuesta realizada por KPMG, para el 27% de las empresas el coste energético supone entre un 5% y un 15% de la facturación, mientras que, para más de la mitad de los encuestados solo supone menos del 5%.
A pesar de que la gestión de los activos energéticos es clave para el margen de las compañías, el 49% de los encuestados carece de equipo o departamento especializado.
Asimismo, el 73% de las empresas consultadas lleva a cabo ejercicios para optimizar al máximo la relación entre la potencia contratada y el consumo, en un contexto, en el que el 42% de las compañías admiten que registran desviaciones sobre la previsión de la demanda.
Para obtener un máximo rendimiento de la energía contratada, el 41% de los encuestados recibe ayuda de asesorías externas, un 20% se lo encargan a la empresa comercializadora y un 39% de los encuestados lo dejan en manos de departamentos internos.
Solamente un 43% de las empresas preguntadas tienen asesoramiento de Empresas de Servicios Energéticos.
Por otro lado, el 45% de los encuestados afirmaron que cuentan con una eficiencia en sus instalaciones de nivel medio, mientras que el 37% indican que el estado de sus instalaciones es de nivel bajo y, solamente, el 18% de las organizaciones consideran alto o muy alto el nivel de sus activos.
CONSUMO ENERGTICO
Según KPMG, la vuelta a la normalidad productiva, unida al conflicto en Ucrania, ha producido fuertes repuntes en el consumo eléctrico, lo que se traduce en que el 33% de las encuestados tuvieron que aumentar su gasto entre un 10% y 30%, y a más de la cuarta parte (28%) a incrementos por encima del 30%.
Durante los periodos de 2019 a 2021, el 43% de las empresas ajustaron su consumo de gas a las necesidades del momento.
Ello se tradujo, según el análisis, en que entre el 2019 y 2020 casi un tercio de las compañías registró caídas del consumo por encima del 30%, un 14% de las empresas recortó entre el 10% y 30%, y un 21% de los encuestados menos del 10%.
La recuperación de la actividad económica elevó el consumo en el 72% de las compañías.
Por su parte el gasóleo, clave en el sector transporte, sufrió modificaciones sustanciales y caídas hasta la mitad en el 45% de las empresas consumidoras de esta energía, según KPMG.
Entre los periodos de 2019 y 2020, el 33% de las compañías tuvieron una disminución en el gasto menor de un 10%. Y el 50% de los encuestados una disminución mayor del 30%, solo en el 17% de las empresas sufrieron un incremento superior al 30%.
Por el contrario, durante el proceso de recuperación económica, el 42% de las empresas consultadas sufrieron incrementos mayores al 30% y solo el 25% sufrió una disminución mayor del 10% entre los años de 2020 y 2021.