VALLADOLID, 2 (EUROPA PRESS)
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) denuncia que Azucarera, filial de la británica British Sugar, sigue infringiendo el Reglamento europeo de la Organización Común de Mercado (OCM) para cuadrar sus cuentas de resultados a costa de los remolacheros españoles.
Dicho reglamento establece que las condiciones de compra han de regirse por acuerdos interprofesionales escritos previos a la formalización de los contratos de compraventa de remolacha, algo que, según denuncia a través de un comunicado recogido por Europa Press, no se está dando en la actualidad.
“Esta situación favorece a Azucarera, que prefiere tener al campo fragmentado y desunido porque le permite imponer sus condiciones en los contratos de remolacha, algo que precisamente el Reglamento Europeo pretende evitar”, censura COAG, que recuerda que es la propia Comisión Europea la que reconoce que “corresponde a las autoridades de los Estados Miembros decidir sobre las medidas que deben adoptarse para hacer frente a esta situación”, por lo que exige que las distintas administraciones actúen ya para corregir esta “ilegalidad”.
Sostiene que estas imposiciones permiten a Azucarera pagar por debajo de los costes de producción “vendiendo” las ayudas como parte del precio ofertado, algo prohibido por la legislación.
Pone como ejemplo que en diciembre el precio de la zona 3, donde España es uno de los mercados más importantes, fue de 512 €/t frente a los 422 €/t en el conjunto de la UE, lo que permite a Azucarera mejorar sus resultados a costa del sector remolachero, ya que es el precio europeo el que sirve para calcular el pago por la remolacha.
“De esta forma, Azucarera ha hecho recaer sobre el sector remolachero gran parte del ajuste de la crisis estos años, mientras que los agricultores se beneficiarán poco de la recuperación comparativamente; y eso a pesar de que, según un estudio publicado por la Comisión Europea, los mayores costes del azúcar en España nunca se ha debido tanto al precio de la remolacha (incluso cuando había Acuerdo Marco Interprofesional), sino a los mayores costes por tonelada de la industria en el procesado del azúcar, que a diferencia de lo que ocurre en la mayoría de países, no han dejado de aumentar estos últimos años”, censura COAG.